EN LA ENCARNIZADA LUCHA QUE SE DARÁ ENTRE BLANCO Y GAYOSSO, A RÍO REVUELTO, GANANCIA DE PESCADORES…
Desde hoy y al primero de julio, la pugna electoral en la búsqueda del Poder Ejecutivo será entre dos contendientes: Cuauhtémoc Blanco Bravo y Rodrigo Gayosso Cepeda, no hay más.
A pesar de que las presuntas encuestas publicadas en las redes sociales marcan como favorito al presidente municipal de Cuernavaca y en tercero y/o cuarto lugar al candidato del Partido de la Revolución Democrática, Rodrigo Gayosso Cepeda, la realidad es que con el divisionismo del Partido Acción Nacional y su carácter flemático de su candidato, Víctor Manuel Caballero Solano, su supuesto segundo lugar en las “encuestas” podría llevarlo más abajo.
Tampoco, en esta elección, el Partido Revolucionario Institucional tiene capacidad de competencia con Jorge Meade Ocaranza, porque le hacen falta tres aspectos fundamentales en un proceso electoral:
El primero es credibilidad; el segundo, después de Francisco Moreno Merino era el precandidato más débil de los nueve que tenía su partido y, tercero, carece de los recursos económicos suficientes para lo que será una contienda de mucho financiamiento, cuando menos –dicen los que saben- de invertir 500 millones de pesos.
Del ex rector Alejandro Vera Jiménez, su capital social y político es mayor al del Partido Nueva Alianza, en donde se percibe el apoyo de todos sus pares, los maestros de Morelos.
Y del médico naturista de Xochitepec, Mario Rojas Alba con el Partido Humanista solamente representará un instituto político negado a perder sus prerrogativas públicas mensuales.
De ahí que solamente hay dos candidatos que pelearán el gobierno de manera sería son: Cuauhtémoc Blanco Bravo y Rodrigo Gayosso Cepeda, quienes están enfrascados en una guerra de declaraciones, de “filtraciones” de documentos lícitos e ilícitos, así como de voceros oficiosos que serán utilizados para la guerra sucia en las redes sociales, principalmente.
Las fortalezas de Cuauhtémoc Blanco Bravo serán su liderazgo y fama, que todavía no se le termina e incluso en los canales de televisión deportivos a nivel nacional e internacional lo mantienen como un personaje sano.
De lo anterior habrá que destacarse que hoy en Morelos un 98 por ciento de sus electores –sobre todo hombres- suele ver ese tipo de televisión deportiva, no solamente para ver el marcador final de su equipo de futbol soccer, basquetbol y demás, sino también para conocer la vida de sus ídolos en el sector.
No son los únicos que apoyan la imagen del ex futbolista a nivel nacional e internacional, también los programas de espectáculos y, en breve, la empresa más grande del mundo: Televisa, reprogramará –en época electoral- una de las telenovelas en las que Cuauhtémoc Blanco Bravo participó junto con la hoy diputada federal Carmen Salinas.
No es el único empuje que hoy tiene el Cuauh, también está la figura (con campaña sucia o no) del líder moral del partido del Movimiento de Regeneración Nacional, Andrés Manuel López Obrador.
López Obrador en Morelos no tiene competencia, de su popularidad se han colgado todos hasta algunos priístas, que durante sus recorridos por sus pueblos lo llaman “amigo” a fin de jalar el voto del 68 por ciento de la población que hoy está en condición de pobreza y ve en el tabasqueño una salida a su situación económica y social.
A cambio, el candidato del PRD, Rodrigo Gayosso Cepeda, cuenta con una estructura que construyó siendo dirigente de su partido, de todos los recursos económicos al ser el abanderado oficial y también de candidatos a cargos de elección popular reconocidos en sus municipios, pueblos y distritos.
Hoy, las supuestas cifras lo mantienen en tercer lugar de las preferencias electorales, pero Rodrigo Gayosso tendrá 60 días de campaña para remontar y además todo un aparato a fin de que el PRD por seis años más continúe dentro del gobierno estatal.
Pero también, el joven político tiene la habilidad del manejo de la palabra, del discurso y de acercarse a los votantes, independientemente de lo que sus detractores personales o por oficio digan es de reconocer su aprendizaje en las lides políticas.
Rodrigo Gayosso Cepeda sin duda alguna es al momento el único dirigente que recuperó al PRD, terminó con las viejas prácticas de negociación de los jefes de sus tribus a los que unió, además de construir sus 33 comités municipales, incluyéndose Cuernavaca que antes era inexistente.
Luego entonces no puede negarse el liderazgo de Gayosso, porque lo sabe construir y hoy cuenta con un grupo de sus generacionales que están a su lado en la pelea por retener el gobierno estatal.
La guerra electoral entre Cuauhtémoc Blanco y Rodrigo Gayosso será prácticamente hasta el final, incluso será el propio primero de julio en donde la sociedad decidirá quién será el próximo gobernador.
Pero habrá que considerar el vox populi cuando afirma que: A río revuelto ganancia de pescadores. Luego entonces, quién será el pescador ganador. ¿Acaso serás tú, Alejandro?