Olas bravas
Inocultable fue el desencanto entre los consejeros del Instituto Nacional Electoral ante el fallo del Tribunal Electoral con respecto al Bronco.
Fue una cubeta de agua helada.
Como el Tribunal es la última instancia, los consejeros no tienen para dónde hacerse. Acatar la indicación de subir al Bronco a la boleta presidencial 2018 es el único camino.
Es indispensable que este desencuentro no suponga que los organismos electorales avanzarán por carriles diferentes a lo largo del proceso electoral.
Una comunicación fluida, permanente y constructiva entre ambas instancias es necesaria para que el proceso llegue a buen puerto.
La institucionalidad es la mejor opción para eludir el embate de las olas bravas.
Las reacciones de los candidatos
La aparición de El Bronco en la boleta presidencial fue recibida de manera diferente por cada candidato presidencial.
Cada uno reaccionó según sus intereses.
Para López Obrador se trata de una mancha más al tigre. Fue una ocasión para seguir generando desconfianza en las autoridades electorales.
Margarita Zavala está molesta, pues ya no es la única independiente en la boleta y habló de incertidumbre.
Ricardo Anaya, sorprendido, no detecta a qué candidato le afectará que El Bronco compita. De seguro no le gustó.
José Antonio Meade fue el único que le dio la bienvenida a la competencia. ¿Por qué habrá sido?
Ciencia y Medio Ambiente
Ante la cercanía del primer debate entre candidatos presidenciales, queda claro que algunos temas de primera importancia han sido dejados de lado.
Ahí está el ejemplo de sustentabilidad y el de la ciencia y tecnología. Los candidatos no los tocan. ¿Será desinterés o desconocimiento?
En los foros que organiza la UNAM, a los que asistieron representantes de los candidatos, se intenta posicionar esos temas y conducir a que haya definiciones y compromisos.
Se trata de claves para que México sea en el futuro viable y competitivo, por lo que no pueden quedar ocultos por los jalones coyunturales de descalificarse unos a otros.
La controversia sobre Chihuahua
La controversia sobre Chihuahua llegó hasta la tribuna del Senado de la República.
Senadores afines al gobernador Javier Corral se lanzaron contra la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de reinstalar el Poder Judicial en la entidad.
El mandatario y los legisladores locales habían metido mano negra.
Para corregir la plana pidió la palabra el senador Patricio Martínez, quien denunció que el mandatario está haciendo de la entidad una causa política.
Los graves problemas administrativos y políticos de Chihuahua no se arreglan con adjetivos y descalificaciones para poderes de la Unión, como el Ejecutivo y el Judicial.
Demandó enfocarse en solucionar la crisis de seguridad que tiene a la población viviendo el horror de la delincuencia desbocada.