TERTULIA POLÍTICA

 

El candidato del desprestigiadísimo Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Morelos y desprestigiado él, Rodrigo Gayosso, trae todo para ganar la elección del primer domingo de julio.

Trae dinero de sobra, de los cientos de millones que ha robado a los morelenses; trae a los candidatos de otros partidos al mismo cargo; trae el control de partidos basura, como el Verde, propiedad del presunto cocainómano, Javier Estrada y, claro, abiertamente y aliado “de corazón a corazón”, trae al PSD, la porquería de organización política propiedad de su “muy adorado” Julio Yáñez (acuérdate de Disneyland). Lo que también trae… ¡en contra!, es al electorado.

Los morelenses se niegan, rechazan la sola idea de que el desquiciado y enfermo mental, Graco Ramírez se mantenga al frente del gobierno del Estado, porque eso ocurriría con Rodrigo Gayosso; son lo mismo, Graco es Gayosso; Gayosso es Graco.

Y como sabe que su participación en el proceso es cuesta arriba; un Blanco imposible de alcanzar,Gayosso ha contratado la asesoría y el servicio de perversos consultores, sujetos sin escrúpulos, que saben que Rodrigo no tiene ninguna posibilidad, pero lo estafan con el cuento de que lo harán ganar.

Aunque el hijastro de Graco sólo se podría convertir en gobernador a través de “un golpe de estado” o reventando la elección, su nueva estrategia es un irrisorio “multinivel electoral”; sí, un ejercicio de persuasión, similar al que hizo millonario a Jorge Vergara, el ahora socio de Graco Ramírez en Zacatepec, con la venta de productos milagro; mercancía trampa.

Le mecánica es más o menos así, me cuenta uno de los jerarcas del cuarto de guerra de Rodrigo: “Tú traes a cinco personas, para apuntarse en la estructura del PRD y comprometerse a votar y promover a su candidato a gobernador y a los que lo acompañan en busca de las senadurías, diputaciones federales y locales y de los ayuntamientos; en cuanto firman la cédula, te entregan mil pesos; y a medida que cada uno de ellos lleva a sus cinco, te tocan primero 2 mil 500, por las primeras 25 personas y, de acuerdo a como crece tu nivel, cuando esas 25 llevan a sus cinco cada una, te tocan 250 pesos, por cada promotor, para sumar 6 mil 250 pesos más; pero si eres “promotor diamante” y tu nivel llega a mil personas, te entregan 10 mil pesos adicionales”

Es así precisamente como se están multiplicando los “seguidores”, los “simpatizantes” de Rodrigo Gayosso, aunque también hay “perros que muerde la mano a quien les dio de tragar”, como es el caso de los “priístas” Delfino Toledano, Romualdo Salgado, Andrés González y José Valladares, además de un largo listado de “don nadie”, parte del cascajo del tricolor, que se habían ido hace mucho, sólo que no lo habían dicho, aunque ya “andaban como voraces promotores del Multinivel Gayosso”.

En ese largo listado de traiciones, se encuentran también personajes de los partidos emergentes, como el presidente (por decisión de Jorge Meade González) del Partido Encuentro Social (PES), José Luis Gómez Borbolla quien, atento a los intereses de su “cuñado”, Sergio Estrada, empezó ya los servicios de esquirol y reventador de la estrategia encaminada al triunfo de Cuauhtémoc Blanco. El ChoChe, hace mucho que sirve a los intereses de Rodrigo Gayosso.

Y, aunque en un principio, “su grupo” le endulzó el oído con la versión de que podría ser presidente municipal, al final registró, me dicen que Gómez Bornolla registró al árbitro Gilberto Alcalá como “candidato del PES” a la presidencia municipal de Cuernavaca, tema que tendrá que reventar, por improcedente.

Pero la procedencia o no, es lo que menos importa, de lo que se trata es de hacer daño; de dañar a la coalición “Juntos Haremos Historia”, en los municipios más importantes en el cultivo de votos, especialmente en Cuernavaca.

Llo peor del caso es que hay quien me asegura que Gómez Borbolla y “sus manejadores”, ya “metieron al aro” a Hugo Eric Flores Cervantes, el presidente del comité nacional del Partido Encuentro Social.

De la representación de Morena en Morelos, por el momento presidida por Jaime Rosas Jiménez, un sujeto gris, agachón y servil a todos los intereses menos a los de Cuauhtémoc Blanco, los cabecillas del PES, no se preocupan, saben que juegan en el mismo equipo y sirven a los mismos intereses, a los de Rodrigo Gayosso.

Así las cosas, creo que Cuauhtémoc Blanco y su amigo y manejador, José Manuel Sanz, deben tener cuidado y decidir si siguen “durmiendo con el enemigo” o de una vez por todas limpian la casa y sacan lo que ya no sirve. No hacerlo, podría ser la diferencia entre perder y ganar. Sólo hay que recordarles que hace seis años, un mes antes de la elección, Amado Orihuela Trejo, estaba entre 14 y 18 puntos arriba a Graco y, en el ámbito nacional, Andrés Manuel llegó al día de la elección con ventaja que se hizo humo, por las traiciones de los Chuchos y de Graco Ramírez. Cuando López Obrador jugó contra Felipe Calderón, siempre estuvo arriba en la encuesta y, al final, le ganó el esposo de Margarita Zavala.