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OBSERVADOR POLÍTICO

La bomba que le puede explotar en las manos al gobernador de Morelos, Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, son las más de 100 personas que fueron asesinadas y por increíble que parezca, inhumadas –por increíble que parezca- desde la Fiscalía en las fosas clandestinas de Tetelcingo. El tema es desgarrador, riesgoso, de salud y humanitario. Por ello, desde las altas esferas de gobierno, se pretendió a toda costa que pasara desapercibido, que fuera inadvertido, invisible pues y al final fracasaron. Hoy, familiares, organismos y medios de comunicación tanto nacionales como internacionales  tienen puestos sus ojos en la tierra de mi general Zapata.

PREOCUPACIÓN.- A pesar de haber sido un tema político el crédito por 2 mil 606 millones de pesos que se gastó el gobernador Graco Luis y que ocasionó un endeudamiento del estado de Morelos por los próximos 20 años, ha sido superado con ayuda de “los representantes populares” que no son otra cosa que los diputados. Desde la Entidad Superior de Auditoria y Fiscalización del Congreso, se limpió, protegió y cuido toda la basura y actos ilícitos que ponían contra las cuerdas al mandatario perredista. El tema no pasó de los medios de comunicación y algunos sectores de la población como reclamos y exigencias. El cochinero fue lavado y resuelto jurídicamente pese a la inconformidad social.

El segundo tema, correspondió a la desaparición de la figura ciudadana como lo es la revocación del mandato, que otra vez, con el respaldo legislativo se desapareció de un plumazo como por arte de magia junto con la Ley de Participación Ciudadana, y pese a las presiones y acciones sociales que se puedan realizar, incluso jurídicas el tema por el momento ha quedado en el olvido. Amén de la estrategia que se contempla en los siguientes días y donde no se permitirá que dicha acción de los diputados, goce de impunidad o puedan estar tan tranquilos como hasta el momento se vislumbra. Viene una reacción y una movilización ciudadana y universitaria.

Por lo tanto, una vez superado el tema de los dineros y la revocación de mandato que tanto le dolía y afectada a Graco Luis, viene ahora lo relacionado con la inseguridad, el tema por el cual cayó Jorge Carrillo Olea como gobernador priista de Morelos y que le provocó un verdadero dolor de cabeza al panista, Sergio Alberto Estrada Cajigal Ramírez.  Por eso las fosas, tiene más que preocupado y sin poder dormir a los titulares del poder Ejecutivo, al segundo en importancia y al encargado de la fiscalía así como a su antecesor. Las macabras historias, los casos y relatos que se han ido documentando son preocupantes, verdaderamente delicados y hoy está la prensa nacional e internacional sobre de ellos. El tema en Morelos fue olvidado, no tuvo repercusiones pero la estrategia de la comunidad universitaria encabezada por el rector Alejandro Vera Jiménez, logró abrirle los ojos a los comunicadores de otros países que han visto delitos de lesa humanidad en el caso Tetelcingo. Y es precisamente porque se les salió de las manos el caso, que hay preocupación gubernamental.

LOS CONFLICTOS.- Una de las principales demandas de la Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos, cuyo vocero es Gerardo Becerra Chávez de Ita, fue el del juicio político por el desvió de más de mil 200 millones de pesos del crédito por 2 mil 806 millones de pesos. Al final, el tema lo resolvieron y se inició una campaña de ataque en su contra y de los principales integrantes de esta organización.

El segundo punto. La petición de la iglesia católica a través del Obispo Ramón Castro Castro, representante en Morelos del Papa Francisco, fue el rechazo a los matrimonios entre personas del mismo sexo y la negativa al aborto  y sí a la vida desde su concepción. La respuesta del gobierno perredista fue la aprobación en automático del matrimonio igualitario una vez que el presidente de México, Enrique Peña Nieto, lanzara la propuesta sobre este particular.

Y finalmente el tercer punto, la exigencia de que se constituyera el Consejo de Participación Ciudadana con el interés de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, para fortalecer la revocación de mandato. Y cuál fue la respuesta del gobernador Graco Luis Ramírez? Simple, desaparecer dicha figura por considerarla anticonstitucional con el apoyo del poder Legislativo y en automático, iniciar una denuncia penal contra el rector de la UAEM, Alejandro Vera Jiménez, por el delito de sabotaje por el tema de las fosas. Esta es la respuesta del Ejecutivo: El ataque y la confrontación antes que el diálogo y los acuerdos.

EL FISCAL, JAVIER PÉREZ DURÓN.- Tras negarse y poner muchas trabajas por más de seis horas por funcionarios de la Fiscalía del Oriente de Morelos en el proceso de exhumación de los cadáveres, tuvo que llegar el titular de la dependencia Javier Pérez Durón, para destrabar el conflicto y solucionar en automático con acuerdos entre universitarios. Lo malo, es que el Fiscal está en una dependencia donde ya nadie tiene confianza y ante el cúmulo de irregularidades y actos al margen de la Ley, ahora por más que intenta las cosas no le salen. No fue bien tratado por la prensa nacional e internacional, también se les salió ya de control al gobierno de la nueva visión. Las muestras de voluntad de Pérez Durón, fueron tardías, como las seis horas que pasaron para poder resolver la diligencia en las fosas.

 

La preocupación se le ve en el rostro. Pese a todo lo que se ha tratado de hacer, es difícil poder responder y mucho menos resolver, las exigencias y demandas justas y legítimas de las familias de las víctimas que después de que sus seres queridos fueron secuestrados, torturados, asesinados y depositados como basura humana. Personas que no recibieron la cristiana sepultura y a quienes jamás les han ido a llorar sus familiares porque no saben dónde están. El utilizarlos como desechos y piltrafas al colocarlos uno tras uno en un predio reducido de tres por cuatro metros más de 100 cadáveres, es hoy lo que tiene con los ojos puestos a la prensa y organismos internacionales de los derechos humanos. Hoy, el tema que era invisible es de los casos más vistos y sonados de la república mexicana. Hoy se conoce más Tetelcingo que cualquier pueblo en proceso de ser mágico en Morelos.

La presencia de Matías Quiroz, secretario de gobierno, fue de tristeza y hasta y vergüenza. Medios nacionales e internacionales le cuestionaron si llegaría el gobernador. Su respuesta fue: “Es una diligencia de la Fiscalía”. Acto seguido, otra pregunta: ¿Sí es una diligencia de la Fiscalía que hace usted aquí? ¿Viene a tomarse la foto?

El silencio fue la mejor respuesta del segundo en importancia en el gobierno de Graco Ramírez, a las interrogantes de los aguerridos reporteros que ayer visitaron Morelos.

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