Elección judicializada
RECHAZO SOCIAL A PARTIDOS.- Hoy en día, se ha podido constatar como en las diversas zonas que son visitadas por los principales candidatos a gobernador, éstos han sido señalados, acusados y hasta literalmente echados de sus lugares de origen que visitan con la finalidad de ganarse la confianza ciudadana y garantizar el voto. Sin embargo, en lugar de analizar el motivo del porque los enfrentan y corren, en automático responsabilizan a sus contrincantes y afirman que son gente pagada por sus enemigos y sus respectivos equipos de trabajo. Lo cierto, es que las promesas que hacen en su mayoría serán incumplidas.
Hoy, en esta temporada de campañas todo lo imposible se hace posible, para ellos, y por lo tanto, prometen cosas que muchas veces están fuera de la realidad con tal de alcanzar su confianza y su voto el uno de julio. Lo cierto, es que la situación financiera en cómo encontrarán al gobierno del estado les impedirá atender sus ofertas que hacen al 100 por ciento.
A manera de ejemplo, durante los seis años de la administración del panista Marco Adame Castillo, la deuda que le heredó a su sucesor Graco Ramírez, fue por mil 500 millones de pesos que al final, los acabaremos pagando todos quienes vivimos aquí en Morelos. Lo triste, grave y preocupante, es que en los próximos meses que concluya la actual gestión del mandatario perredista, estará dejando vacías las arcas del estado y peor aún, una deuda a pagar durante varias décadas que superan los 10 mil millones de pesos. Por lo tanto, los ocho candidatos, todos sin excepción no tendrán las condiciones para poder atender sus compromisos que como locos, están haciendo con tal de alcanzar la confianza y el voto ciudadano para este uno de julio.
CONFLICTOS JUDICIALES ELECTORALES.- Hasta el cansancio se ha dicho que la falta de recursos económicos tanto en el IMPEPAC como en el Tribunal Estatal Electoral, provocará severos problemas en ambas instituciones porque incluso, están en riesgo de que puedan colapsarse, incluso, más allá de los señalamientos que taladran fuertemente a los titulares de estos órganos el que los estén acusando de imparciales y de estar a favor de algunos candidatos.
El haber sido avalado Cuauhtémoc Blanco en su residencia por parte del IMPEPAC y TEE provocó que los partidos políticos como el PRI, PRD y PVEM hayan decidido impugnar bajo el argumento de diversas irregularidades en los documentos que fueron presentados para acreditar su residencia efectiva en Morelos de cinco años. Incluso, estas impugnaciones ya se fueron al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Peor aún, que con los recursos autorizados es imposible organizar el proceso electoral, puesto que el IMPEPAC solicitará un aumento y el TEE ya presentó su impugnación.
DESASTRE EN EL IMPEPAC.- Y es que a poco más de 90 días de haber sido designado Enrique Díaz Suastegui como Secretario Ejecutivo del IMPEPAC, quien durante este tiempo realizó un trabajo gris fue removido por el INE. Llegó Jaime Sotelo, quien tiene una experiencia de 20 años en el INE porque se ha desempeñado como Vocal Secretario en la Junta Distrital 02, y actualmente se desempeñaba como Vocal Secretario de la Junta Local 01 del propio INE. Su llegada es un acicate a los tres últimos consejeros que llegaron a finales del año pasado al órgano electoral y que junto con los “viejos”, no han logrado la unidad que tanto se requiere dentro del IMPEPAC porque sus intereses políticos, económicos y personales pueden más que los intereses ciudadanos.
El argumento es que no tienen el presupuesto económico para la operatividad del órgano electoral, incluso, se han dado el lujo de despedir personal sin liquidarlos conforme a lo que establece la Ley, incurriendo en otra violación severa a la normatividad jurídica vigente. Sin embargo, la crisis llegó a todo el personal que incluso es tratado laboralmente como “esclavos”, dicho por los propios representantes de los partidos políticos, menos a los consejeros, quienes siguen utilizando el vehículo oficial, perciben sus arriba de 60 mil y 70 mil pesos mensuales más los viáticos y fondo revolvente para sus actividades. Es decir, a todo el personal del órgano les pegó la severa crisis menos a los siete consejeros.
Cabe mencionar que llega por intervención e imposición del Instituto Nacional Electoral, a 60 días de la jornada Electoral, derivado de todo el desacuerdo al interior del Consejo Estatal Electoral, y que incluso se puede apreciar sesión tras sesión desde que llego el bloque opositor a la presidenta Ana Isabel León Trueba en octubre del 2017. Por lo tanto, el nombramiento de Sotelo fue como cargado de despacho con un objetivo, hacerse cargo del trabajo durante el proceso electoral para posteriormente, pueda reincorporarse a su cargo como Vocal Secretario de la Junta Local 01 del INE en Morelos.
Siguen en el IMPEPAC sin tener a un Director Jurídico, ni al Director de Administración y Financiamiento, este último cabe mencionar fue quien demando a la presidenta Ana Isabel León Trueba por acoso laboral.
En este tema, cabe señalar, se impuso también por el INE al Director Ejecutivo de Organización y Partidos políticos Francisco Patiño Ortiz, quien posee una nula experiencia en la Dirección de Organización, ya que ha desempeñado cargos temporales en el INE, entre ellos consejero en el Consejo Local donde no se toman decisiones de ningún tipo, sobre todo porque está centrado en el Consejero Presidente quien es a su vez el delegado del INE en Morelos. Es inaudito que los cambios realizados se realizaron sin que fueran tomados en cuenta los Consejeros Electorales, o lo que es igual se los impusieron con un objetivo fundamental: vigilar lo que sucede al interior del Consejo y por lo tanto, serán quien los oídos y orejas de INE para de esa forma, exhibir las incongruencias en las que ha caído el IMPEPAC.
En síntesis, el INE ha tomado el control de la elección en Morelos.
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