Elección a muerte
Ninguno de los tres posibles ganadores de la carrera por la gubernatura de Morelos ha construido puentes de comunicación con sus rivales. La que vemos es una campaña sin diálogo entre los competidores, pero también sin reglas ni respeto por el rival. La que transcurre es la elección más complicada de la historia reciente del estado y lo que vendrá después del 01 de julio es peligrosísimo para todos los candidatos. En cualquier escenario el perdedor es Graco Ramírez.
La contienda por la gubernatura de Morelos paso de ser una competencia electoral a convertirse en una lucha feroz entre algunos candidatos. La elección que estamos viendo no tiene reglas, ni árbitro, ni mucho menos respeto entre contrincantes; unos y otros se atacan y ninguno ha construido puentes de diálogo, ni esta interesado en lograr acuerdos con el rival. La batalla entre los tres candidatos punteros es atroz, a donde tope y sin contemplaciones. El ganador tendrá un escenario muy complicado para gobernar y los perdedores vivirán un infierno en el nuevo gobierno. A quien le irá mal en cualquier escenario es a Graco Ramírez.
Ninguno de los tres candidatos que encabezan las preferencias electorales ha mostrado el interés de dialogar con sus rivales, ni mucho menos de establecer algún tipo de acuerdo de campaña. En otros tiempos los contendientes hablaban de manera directa o a través de terceros, fijaban reglas, marcaban límites y establecían acuerdos políticos para que al final de la contienda se iniciara una nueva etapa en torno al ganador. Hoy no es así.
Los agravios entre unos y otros son enormes y sin límites, los golpes que se lanzan rebasan lo político y en muchos casos entran al terreno personal. A Cuauhtémoc Blanco le han hecho de todo: lo acusan, lo persiguen, lo agravian y hasta lo han amenazado en lo físico y en lo familiar. La respuesta del futbolista es igual de dura: no se chica ni tampoco cede terreno, cada golpe que recibe lo contesta con la misma intensidad y con la promesa pública de que como gobernador actuará contra Graco Ramírez y de su familia.
El golpeteo es muy fuerte hacia todos lados y en esa dinámica ya metieron también al candidato del PAN. Víctor Caballero se mantuvo por varias semanas al margen de esta pelea y trató de no salirse del terreno de las propuestas, la personalidad del médico le llevaba siempre a estar en un plano distinto al del conflicto, lejos de la confrontación y sin ataques personales de ningún tipo. Ahora que también lo han agraviado, lo señalan y lo acosan, el tono de su discurso se elevó y también promete que de ganar la elección investigará a fondo cada peso gastado por la actual administración.
El camino que sigue la elección de Morelos es peligroso desde todos los ángulos. Dos de los tres candidatos punteros han prometido actuar en contra del gobernador y proceder de manera penal contra varios de los integrantes del gobierno y de la familia del gobernador. Rodrigo Gayosso también asumió una postura dura al acusar a Cuauhtémoc Blanco de estar coludido con el narcotráfico y a Víctor Caballero de desfalcar al erario.
Los tres personajes hacen propuestas de campaña, pero todas son opacadas por los ataques que lanzan contra su rival. Cuauhtémoc Blanco dice que atenderá los problemas regionales y ayudará a los más necesitados, Víctor Caballero ofrece detonar la economía estatal, mejorar la estructura educativa y de salud, Rodrigo Gayosso promete transparencia, continuidad en los programas y obra pública... pero lo que más recuerda la gente de los tres son los ataques contra sus rivales.
El problema de lo que vemos no es sólo lo que se escucha de boca de los candidatos y de sus equipos de campaña, lo más peligroso vendrá después de la elección, porque ninguno de los tres podrá dialogar con los otros y sus diferencias las veremos reflejadas en la marcha de la próxima administración.
Veámoslo de esta forma: si gana Cuauhtémoc Blanco el panista Víctor Caballero y su grupo será totalmente relegado de la vida política y les cerrarán todos los espacios de participación en el servicio público; para Rodrigo Gayosso el escenario sería peor, porque contra él y los suyos vendrá una persecución judicial que podría agravarse si el próximo presidente de México es Andrés Manuel López Obrador. En cualquier caso las baterías del gobierno del futbolista se enfocarían en contra de Graco Ramírez y su gente más cercana. Algo similar ocurriría si ganara cualquiera de los otros dos.
Las cosas tampoco serían sencillas para Cuauhtémoc Blanco si llegara a ser jefe del ejecutivo: gobernar un estado como Morelos es sumamente complicado, sobre todo en las condiciones en las que dejarán la administración estatal. Al próximo gobernante le entregarán un estado sumido en una crisis de seguridad, con serios problemas económicos y con una deuda multimillonaria que limitará muchísimo su capacidad de operación. Aunado a ello la oposición política del futbolista puede ser muy amplia y eso complicaría cumplir sus promesas de campaña.
El punto es uno: lo que estamos viendo es una elección sin reglas y sin diálogo, en donde la lucha es a muerte y ninguno de los posibles ganadores están pensando en lo que vendrá después del 01 de julio.
No hablo de que se tomen acuerdos en lo oscurito, ni mucho menos de que se pasen por alto las faltas cometidas por la actual administración, lo que refiero es que después de las elecciones será necesario que se construyan condiciones de gobernabilidad para la próxima administración y nadie está pensando en ello.
Los carniceros de hoy serían las reces de mañana.
- posdata
Justo en un mes serán las votaciones. Pasadas las seis de la tarde del próximo primero de julio, si no ocurre algo extraordinario, tendremos una idea clara, aunque no oficial, de quien ganó las elecciones. Un día después el ganador de la contienda será declarado gobernador electo y en ese momento los morelenses tendremos dos gobernadores, uno en funciones y otro electo.
En un mes cambiarán muchas cosas en el estado. Con un gobernador electo, el poder del gobernador en funciones quedará reducido al mínimo e iniciará un proceso administrativo, político, legal y anímico muy duro en el ejecutivo estatal. Nadie querrá estar junto al que se va, todos buscarán estar cerca de quien llega.
Si gana el hijo del gobernador, como algunos funcionarios de primer nivel piensan, la transición será sencilla, porque (literalmente) el poder quedará en familia y no habrá mayor revisión de las cosas. Digámoslo claro: si hay un candidato que conoce el estado que guarda el gobierno actual es Rodrigo Gayosso.
Pero si el ganador de la elección es otro la transición no será sencilla y podría incluso llegar a ser muy dura. Si el vencedor en las urnas es el doctor Víctor Caballero, su equipo de transición iniciará una revisión exhaustiva de las cosas, aunque por su prudencia política y bondad natural el panista actuará dentro de los límites de la ley y sin ir más allá de lo moralmente correcto. Víctor es como su apellido y a pesar de las agresiones que recibe podría ser capaz de llegar a algún acuerdo político con todos sus adversarios.
Cosa muy diferente será si el ganador es Cuauhtémoc Blanco. El deportista no es político (siempre lo repite) y su breve carrera como servidor público ha sido acosado muy duro por el gobierno actual y sus aliados, pero también traicionado por la gente en la que ha confiado. Al ídolo de Tepito no le temblará la mano para actuar contra Graco Ramírez y los suyos, por el contrario, más allá del discurso político la persecución de estos personajes es una obsesión personal que lo motiva para ganar la elección.
Justo a un mes de las elecciones los discursos de campaña se han endurecido y eso no anticipa nada bueno para nadie. Ninguno de los tres candidatos se beneficia de una situación así, pero el más perjudicado de esta situación es el gobernador Graco Ramírez.
Véanlo de esta manera: si gana Cuauhtémoc o Caballero, ambos irán contra Graco. Si gana Rodrigo, pero gana López Obrador, Anaya o Meade, desde México vendrán por Graco.
Ya vimos lo que pasó con Duarte... Y con Karime.
- nota
Cuando se hicieron públicos los documentos de las transferencias a las cuentas de los diputados del congreso local se abrió la Caja de Pandora. Quien filtró los recibos no pensó que habría consecuencias y que las copias de lo que se hizo en la cámara de diputados están en varias partes.
Pero no sólo eso: la Caja de Pandora no se resume en lo hecho y deshecho en el Poder Legislativo; cuentan los que saben que al desatarse esta batalla podrían ver la luz documentos del ejecutivo sobre transferencias, ajustes presupuestales, contratos de obra pública, adjudicaciones y muchísimas cosas más que se hicieron a lo largo del sexenio. Algunos platican que hay papeles escritos de puño y letra del gobernador.
Será interesante ver hasta que punto se eleva la temperatura política ahora que comenzó la guerra de guerrillas. Muchos políticos presumen tener grabaciones, otros dicen tener copias, unos más cuentan que guardaron las conversaciones de WhatsApp y hay quienes detallan la manera como se triangulaban los negocios y los nombres de quienes deban la cara.
Quien filtró los documentos le puso la pimienta a la elección.
- post it
Ayer por la mañana Carlos Loret de Mola difundió una nota que se refiere al compromiso con la transparencia y rendición de cuentas de los candidatos a la gubernatura de los diferentes estados del país, incluido Morelos. Esto es lo que dio a conocer el periodista:
“Fíjense que el instituto mexicano para la competitividad del IMCO que fue el gran impulsor de las Tres de Tres, las declaraciones fiscal, patrimonial y de interés de los candidatos y de los funcionarios, están presentando una evaluación, un corte de caja de como va el cumplimiento a un mes de las elecciones.
- Alexandra Zapata- ...Me quiero echar un clavado a dos casos particulares que están con alerta roja, la primera es Morelos, en Morelos falta el candidato puntero en las encuestas de Morena, Cuauhtémoc blanco que no ha querido presentar sus Tres de Tres, también falta el candidato Rodrigo Gayosso, hijo del actual gobernador que va por el PRD y finalmente falta Alejandro Vera, el ex rector de la universidad autónoma de Morelos.
Carlos Loret- Los tres cuestionadísimos por los temas financieros... ni se quieren acercar a la Tres de Tres. A los tres los han acusado de desvió de lana.
Alejandra Zapata- Exactamente Carlos, son los tres que faltan, algo nos están diciendo con su omisión de Tres de Tres. Quienes ya han presentado su Tres de Tres son el candidato que va por el PAN y Movimiento Ciudadano y el candidato del PRI.”
- redes sociales
A propósito de dinero que algunos diputados recibieron dinero del congreso, hay dos más de los cuales no se ha hablado, pero también fueron beneficiados: Alberto Martínez recibió 6 millones de pesos y Francisco Moreno 8 millones de pesos.
¡Quihubo!
- es viernes
Tres de Tres: carnita, vinito y postre.
Hoy toca.
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