Desde su casa de transición, ubicada en la colonia Roma, López Obrador afirmó que a partir del 1 de diciembre, cuando comience su administración, quedarán suspendidos todos los fueros y privilegios para los funcionarios públicos.
“Se terminan todos esos métodos que tienen que ver con la política tradicional. Se va a romper ese molde. Vamos a cambiar, ese fue el mandato del pueblo en la elección del 1 de julio “ aseguró.
Entre las directrices destacan: que los funcionarios públicos tendrán prohibida la contratación de familiares y los empleados de confianza laborarán de lunes a sábado al menos ocho horas al día.
Además, no se podrá asistir al trabajo en estado de ebriedad ni ingerir bebidas alcohólicas en las oficinas públicas.
El tabasqueño dijo que durante su administración tampoco habrá adquisición de vehículos nuevos para funcionarios, no se comprarán sistemas de cómputo en el primer año de gobierno, no habrá más de cinco asesores por secretaría en el gobierno federal y únicamente los titulares de las dependencias tendrán secretario particular.
“No se va a aceptar chantaje de nadie porque el presupuesto es el dinero del pueblo. Entonces vamos a presentar en tiempo y en forma el presupuesto sin esas partidas”, dijo Andrés Manuel.
Otras de las acciones serán que tampoco habrá bonos ni otras canonjías para los funcionarios; los gastos de viáticos se limitarán a lo indispensable y se suprimirá toda partida para gastos médicos privados y de seguro de separación individualizada.
No se viajará al extranjero sin autorización del secretario y la partida correspondiente se limitará a lo indispensable, y solo los involucrados en tareas de seguridad contarán con guardaespaldas.
Los lineamientos incluyen también prohibir a los funcionarios de Hacienda, Comunicaciones, Energía y otras áreas “que convivan en fiestas, comidas, juegos deportivos o viajes con contratistas, concesionarios, grandes contribuyentes, proveedores o inversionistas vinculados a la función pública”.
También reducir 50% el gasto de publicidad del gobierno y cancelar todos los fideicomisos públicos.
“Serán cancelados los fideicomisos y cualquier otro mecanismo utilizado para ocultar fondos públicos y evadir la legalidad y la transparencia”.
AMLO se comprometió a impulsar la creación de una fiscalía anticorrupción que que no permitirá que prevalezca la impunidad pues, dijo, “actuará con absoluta libertad y castigará a cualquier persona que cometa un delito de esa naturaleza, trátese de quien se trate, compañeros de lucha, funcionarios, amigos y familiares”.
López Obrador anunció que ganará 108 mil pesos mensuales como Presidente. Esa remuneración, aseguró, representa 40 por ciento de lo que gana actualmente Enrique Peña Nieto: 270 mil pesos al mes.
También dijo que se reducirán a la mitad los sueldos de los altos funcionarios públicos que ganen más de 1 millón de pesos anuales; tal recorte se aplicará de manera progresiva y proporcional.
“Estas medidas pueden generar alguna preocupación, espero que haya comprensión de todos porque es lo que planteé en la campaña. No se va a cometer injusticia. Lo que quiero es que el presupuesto llegue a todos”, señaló López Obrador.
