Cuando el hijo del tata dijo en la UAEM: “MORELOS REPITE LA HISTORIA DE AYOTZINAPA” desdibujó de un plumazo la imagen política nacional de Graco Ramírez, quien de hoy en adelante sufrirá para ser nominado candidato presidencial del Sol Azteca. Lo hundió la presencia del líder moral de la izquierda pacifista, el ideólogo Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.
Hijo del general Lázaro Cárdenas, el último presidente nacionalista, el que nacionalizó el Petróleo, y para muchos el mejor mandatario del siglo XX. Los medios nacionales ignoraron la noticia de Cuauhté- moc Cárdenas en Morelos, ese vacío, deja el tufo de la Secretaría de Gobernación llamando a las redacciones de Reforma y El Universal entre otros, para bajar la intensidad de la información que estaba llevando al gobernador de Morelos directo al precipicio. No lo correrán por ahora, para no mostrar debilidad.
Pero la candidatura ya se alejó del horizonte. La marcha convocada por el señor Obispo Ramón Castro y Castro también escaló los tableros nacionales y caló profundo allí donde duele. Por algo el gobernador de Morelos corrió a solicitar una audiencia con el nuncio Papal, para pedir que le quiten de encima a este obispo del demonio. Ni caso le hicieron al tabasqueño en la nunciatura. Le dieron el avión, igual que al obispo y a Sicilia les dan el avión en Bucareli, cuando van a quejarse de la tiranía gubernamental en las oficinas del chino Osorio Chong.
Pero el hecho que Don Graco Luis haya ido de plañidera haciendo el papel trágico de La Llorona, indica que la marcha catedralicia fue un gancho al hígado. Y luego el uno dos. Cuauhtémoc vino a dar el Beso del Diablo, cuando menos se lo esperaba, Ramírez se tropezó con las fosas de Temimilcingo, está en la lona pero aún no es nocaut. Sin embargo la dinamita discursiva del michoacano lo baldó. Le canceló la candidatura presidencial que disputa en el interior del PRD contra Mancera, el del pífano, o silbato protector de doncellas.
Cárdenas es un político respetado por serio, ceñudo, frío y directo. Por su serenidad y austeridad en su vida pública y privada. El Hijo del Tata es un ex, de muchas cosas: senador, ex subsecretario de Agricultura, ex Gobernador de Michoacán, ex regente del Departamento del distrito Federal, Fundador de la Corriente Crítica que dividió al PRI, ex candidato presidencial del Frente Democrático Nacional, luego fundador y presidente del PRD, y padrino en un tiempo de Andrés Manuel López Obrador, Cárdenas para muchos millones de mexicanos ganó las elecciones de l988, que le fueron arrebatadas por el sistema político del PRI. Los duros señalamientos del líder moral de la oposición izquierdista Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, contra su ex camarada del PRD colocaron al gobernador en la lona y contando, sobre todo porque los unía una larga y antigua lucha democrática.
Si Cárdenas lo sataniza, a Graco ya lo besó el Diablo. Recordemos que Graco y Cuauhtémoc fueron correligionarios de la expresión denominada “Las Roscas”, (Rosario-Cárdenas) a la que Graco Ramírez pertenecía en aquellos entonces, enfrentados a Los Chuchos, Eche un vistazo a sus dichos caro lector: “Muchos creímos que el caso de los 43 estudiantes de Ayotzinapa sería el último en el cual veríamos implicadas a autoridades del gobierno, pero vemos que la historia se repite con la inhumación ilegal de más de 100 cadáveres en el poblado de Tetelcingo”, declaró Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, durante una visita inesperada al panteón donde se lleva a cabo la diligencia de exhumación de 116 cadáveres desconocidos.
Al conectar Tetelcingo con Ayotzinapa. Cárdenas sembró preocupación, disparó las alarmas en Bucareli, por eso los operadores llamaron a Reforma y a otros medios de gran tiraje, para detener la nota. Pero no pueden frenar las redes sociales. Esa herramienta los está haciendo picadillo. Más tarde, su visita a la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM, Cuauhtémoc Cárdenas calificó como “grave” lo que se vive en esta entidad por los retrocesos en materia legislativa con el tema de la Ley de Participación Ciudadana, las fosas de Tetelcingo y la inseguridad, de ahí que se pronunció por realizar una investigación a fondo y castigar a los responsables políticos y sociales que existan- Y eso llega a la casona de la calle de Chimalacatlán como una roca de fuego lanzada por un ariete. Esto apenas empieza, Tetelcingo, Cuautla, puede ser una fosa en la que no solo quepan restos humanos, podría ser un reservorio de cadáveres políticos. Y VOY POR MÁS. Terribles declaraciones del hijo del general Morelos violó tratados internacional