I. Claridades. Poco a poco aterrizan las ideas de campaña. Durante la realización del primer foro por la pacificación del país, organizado en Ciudad Juárez, Chihuahua, ante familias de desaparecidos y asesinados, Andrés Manuel López Obrador, a quien hoy le entregarán la constancia de validez como presidente electo, reiteró que está a favor del perdón a presuntos infractores, pero en contra del olvido de crímenes y víctimas. Pidió a los participantes debatir sin censura ni tabúes. “Coincido con los que dicen no olvidar, pero estoy a favor del perdón. Respeto mucho a quienes dicen ni perdón ni olvido. Digo, olvido, no; perdón, sí”, sentenció, lo que causó el aplauso de una parte del público. Y aunque a muchos no les queda totalmente transparente a quiénes se refiere cuando habla de perdones, un hecho es que su postura es de vanguardia. Allana el camino para que, a partir del 1 de diciembre, la nación camine parejito.
II. Madurez política. Como anfitrión del primer foro para la pacificación del país, Javier Corral, gobernador de Chihuahua, evidenció una civilidad digna de reconocimiento. Recibió a Andrés Manuel López Obrador en el aeropuerto y anunció que “trabajaremos hombro con hombro”. Juntos, además, visitaron un hospital de especialidades que, tras su inauguración, quedó abandonado, y más que buscar culpables, pugnarán por su funcionamiento. Oposición responsable es encabezar una relación institucional cercana al próximo gobierno en beneficio de Chihuahua y del país. Es momento de sumar. Algo es claro, Corral rescata el prestigio panista. ¿O quién más?
III. Barranco. El senador electo Juan Zepeda está inquieto sobre el estado actual del PRD. “Esta crisis no ha concluido, puede ahondar una vez que entre el nuevo gobierno federal, que entren los gobiernos estatales o los gobiernos municipales ganados por Morena. ¿Eso qué significa? Que van a empezar a acercarse a cuadros del PRD para que se vayan con ellos. La tentación, sin duda, ahí va a estar y ahí puede ahondarse la crisis del PRD. No hemos tocado fondo”. La desbandada, ya notoria, apenas comienza. Tiene razón el senador, el sol azteca está en riesgo. Reconoció que la situación se remonta al llamado Pacto por México, pero descartó que haya sido un error la coalición formada por el PAN-PRD-MC. Si comienza con hipótesis erróneas, pronto no habrá quien lo siga. El resbalón fue unir el agua y el aceite, no hay más.
IV. Se vale pedir. Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex, consideró necesario iniciar los trabajos para deslindar a la Gobernación de las tareas de seguridad pública y reinstalar la Secretaría de Seguridad Pública, como una acción para frenar la ola de violencia en el país. El combate a la inseguridad debe intensificarse urgentemente y no esperar los tiempos de la transición política, comentó. “Por eso hacemos un llamado al gobierno federal para que reconozca que sigue siendo el principal responsable de mitigar la crisis”. Delineó seis puntos estratégicos para que el gobierno en turno se asuma como el principal responsable de emprender, a la brevedad, las acciones necesarias para pacificar el país y disminuir los índices de homicidios dolosos, de extorsiones, de secuestros y de la comisión de muchos delitos del orden común. Quedan unos meses de esta administración, ¿y apenas se les ocurre? Bueno. Mejor tarde que nunca.
V. Precaución. En Nuevo León hay un rezago en el tema de los derechos de la comunidad LGBTI. La Comisión Estatal de Derechos Humanos propuso la modificación a leyes estatales para permitir el reconocimiento del concubinato y la adopción entre personas del mismo sexo, así como el derecho a solicitar una nueva acta de nacimiento para el reconocimiento de la identidad de género, entre otros puntos. Durante la presentación del Diagnóstico Legislativo sobre el Reconocimiento de los Derechos Humanos de las personas LGBTI, Sofía Becerra Velasco, titular del organismo, denunció el rezago de derechos humanos para la comunidad. “Las leyes estatales no previenen la discriminación y no ofrecen la adecuada protección a los derechos humanos”, dijo. No es pesimismo, pero en un estado donde el gobernador propone cortarle las manos a los criminales. ¡Uy!