Preguntar al Betito
Fuerzas federales volvieron a sacar las castañas del fuego.
Tal parece que ante casos de alto impacto, la policía de la CDMX se pasma.
Todavía no queda claro si es por falta de competencia o por complacencia interesada. No tiene red para peces gordos.
Todos recuerdan que fueron infantes de Marina los que pusieron las cosas en su lugar en el caso de El Ojos, en Tláhuac, mientras que el delegado y los jefes policiacos de la zona volteaban para otro lado.
El caso del Betito de Unión Tepito es todavía más importante. El peligroso delincuente fue capturado por agendes de la PF sin disparar un solo tiro.
Está en condiciones de rendir declaración y responder preguntas, algunas obligadas, como qué grupos los abastecen de droga y qué jefes policiacos y delegados políticos los protegen.
A todos interesan las respuestas.
Más fotos
A todos atraen las fotos del Presidente constitucional y del Presidente Electo en Palacio Nacional.
Es un inmueble fotogénico con dos personajes interesantes.
Son dos añejos rivales políticos que ahora se esmeran por enviar a la gente un mensaje de armonía al arranque formal del proceso de entrega-recepción.
A partir de mañana mismo los equipos de ambos presidentes pondrán manos a la obra. La idea es que la buena disposición de los jefes permee en los equipos y entreguen buenas cuentas.
Tendrán que trabajar duro, aunque no haya fotógrafos presentes.
Adiós al EMP
El Presidente Electo fue cuidadoso al elegir las palabras para ratificar que el Estado Mayor Presidencial termina funciones el último día del mes de noviembre.
López Obrador dijo: Quiero ser respetuoso, pero son ‘otros tiempos’ y eso supone un nuevo modelo de seguridad para el Presidente de la República en el que el Estado Mayor no tiene cabida.
El nuevo modelo supone habilitar a un grupo pequeño de profesionales de la seguridad, 20 personas, hombres y mujeres, que recibirán un curso de capacitación. Sólo eso.
De los integrantes del gabinete, sólo tendrán protección los que trabajen en áreas de Seguridad.
Del proyecto de descentralización dijo lo que todo mundo sabía: que no se hará en un año, y que se irán construyendo paulatinamente las condiciones para concretarlo.
Sin margen de error
La construcción de la propuesta de seguridad del nuevo gobierno recorrerá un largo y sinuoso camino.
Las propuestas iniciales no cuajan. La propuesta de amnistía tiene que encontrar una narrativa clara, y lo del perdón y el olvido no cayó en terreno fértil.
El nuevo gobierno tiene de su parte el hecho de que la gente quiere un cambio, una manera distinta de enfrentar el problema de la delincuencia.
Más que categorías éticas se requiere justicia. Aplicar la ley fortalece la estabilidad y a las instituciones.
A todos sin excepción conviene que los nuevos responsables de las áreas de seguridad acierten en sus diagnósticos y en sus políticas públicas.
En cuestión de seguridad no hay margen de error.