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OBSERVADOR POLÍTICO

 
 

Cuando cobró como diputado federal plurinominal por el PRI, Francisco Moreno Merino, acusó a Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, entonces senador de la república por el PRD, de ser un mitómano, alcohólico y pederasta. Estos tres calificativos fue porque en aquél entonces (hace seis años), el ahora saliente gobernador de Morelos, le solicitó a la Procuraduría General de la República, que lo investigara por la enorme fortuna económica que había logrado acumular. Hoy, un sexenio después, la PGR debería de investigar a los dos para saber su poder económico que han logrado acumular al cabo seis años.

SE VA PACO DE MORELOS.- Sin importar que sea el hazmerreír de la gente, mucho menos el responsable del robo y saqueo de alrededor de 150 millones de pesos –que de ser investigado y encontrado culpable, tendría que ser castigado penalmente- del Congreso del Estado, Paco Moreno Merino, el catedrático de la Universidad Nacional Autónoma de México, dejará de dar clases en la máxima casa de estudios del país y al mismo tiempo, huye de la tierra de Zapata, tras haber sido designado por la presidenta nacional del PRI, Claudia Ruiz Massieu, como delegado del CEN del tricolor en Quintana Roo.

El PRI y Ruiz Massieu no entienden que seguir protegiendo a personajes de esta calaña es lo que los lanzó de Los Pinos y los ubicó en la última elección del primero de julio, en la terca fuerza política en el país y en varios estados, ocupó los últimos lugares e incluso, en otros hasta desapareció por la escasez de votos que tuvieron sus candidatos.

Desde ahora, la militancia tricolor de Quintana Roo está preocupada por la designación que hizo Claudia Ruiz Massieu, ya que con tal de proteger a Paco Moreno Merino de lo que se le viene encima con los diputados que este día toman protesta como tal y quienes amenazaron con llegar a fondo para saber que hizo el ya ex diputado local de la peor legislatura local, el priismo de esta región del Mar Caribe podría perder las elecciones que tendrán el próximo año 2019. En serio, hay preocupación entre la militancia de Quintana Roo tan pronto conocieron la designación de la dizque presidenta del CEN del PRI.

CINISMO DE MORENO.- Cómo olvidar cuando en una de las tantas reuniones públicas y privadas que sostenía en Palacio de Gobierno, Francisco Moreno cuando era presidente de la Junta Política del Congreso del Estado, el priista Francisco Moreno Merino, hizo lo que mejor sabe hacer, bajarse los pantalones ante quienes considera “gente importante” o con poder político como sucedió con el todavía gobernador Graco Ramírez, a quien de forma cínica hizo entrega de un cuadro de Benito Juárez, y fiel a su estilo, señaló: “A nombre de casi todos los legisladores de la LIII Legislatura, entregarle al gobernador Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, un cuadro para que en él y con él, gobierne en Morelos o al destino que la república le digne”. Y estas declaraciones las vertió cuando el originario de Tabasco pretendía ser candidato a la presidencia de la república por el PRD. Con esta declaración, quedaron en el olvido aquellos calificativos que le había conferido de: mitómano, alcohólico y pederasta.

TOMA EL CONTROL POLÍTICO EL CUAUH.- El otrora todo poderoso Graco Ramírez ya no sabe qué hacer al ver que está políticamente debilitado porque sus protectores y cómplices como Enrique Peña Nieto, así como integrantes del gabinete presidencial ya no podrán respaldarlo y por tanto, aquél feroz luchador social y peor aún mandatario estatal, hoy trata de minimizar las cosas y busca el diálogo, el acuerdo y con su próximo sucesor y enemigo político, Cuauhtémoc Blanco Bravo. Lanza exhortos, llamados y busca acuerdos que no son escuchados, como por ejemplo, recientemente afirmó: “En la reunión de la Confederación Nacional de Gobernadores, el Presidente Electo, Andrés Manuel López Obrador, da ejemplo de responsabilidad republicana, continuar con lo pendiente y asegurar gobernabilidad.

Se acabaron campañas. Ahora a dar resultados”. Mientras que en Morelos, el futbolista, a quien así siempre llamó de forma despectiva, hoy se da el lujo de no querer verlo y mucho menos estrechar su mano y de plano negar conversar con él. El daño que tanto Graco Ramírez como Rodrigo Gayosso le hicieron al próximo titular del poder Ejecutivo no fue cualquier cosa. Lo señalaron como asesino, narcotraficante, y pretendieron bajo cualquier circunstancia retirarlo de la alcaldía y para ello, le implementaron dos juicios políticos, pretendieron destituirlo de la alcaldía y jamás lo lograron. Y ahora que están en la decadencia de su cargo con severos cuestionamientos por actos de corrupción y saquero de dinero, con un estado endeudado de más de 12 mil millones de pesos, buscan y quieren que haya perdón así como borrón y cuenta nueva.

Más aún cuando el alcalde capitalino y próximo mandatario, es quien ha tomado el control político del estado, con la llegada de Ponchito, el diputado que presidirá al Congreso Local y es de su gente, además de que a partir de hoy, estará en el Congreso en primera fila. Algo que no hizo durante los últimos tres años. Su presencia, provocó ya el cambio de todo el mecanismo legislativo y tendrá el respaldo de la LIV Legislatura por lo que le demostrará a su sucesor de que lo será capaz de hacer tan pronto tome protesta, y más aún, cuando se niega su administración a entregarle la información que se le ha solicitado para conocer el estado financiero, político, laboral y social en que se encuentra la administración. Hoy, la presencia de Cuauhtémoc Blanco evidenciará el antes y después en la política de Morelos.

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