Encapuchados recargados
La película de los encapuchados revoltosos, agresivos, ya se vio antes.
Hace justo seis años, en el marco de la toma de posesión de Enrique Peña agredieron a la Ciudad de diversas formas.
Qué curioso que ante el cambio de gobierno vuelvan a las calles. Pero ahí están. ¿Se volverán a salir con la suya?
En verdad que el Gobierno de la Ciudad anda distraído, pero es inadmisible que no se aplique la ley.
Como es tradicional en estos casos los encapuchados no se mandan solos. Aparecen, desaparecen, reaparecen siguiendo los dictados de una mano que mece la cuna.
Todavía es tiempo de pararlos en seco. Quitarles la capucha y meterlos a la cárcel.
Nunca es mucho pedir que se aplique la ley.
Muy agradecido
En la línea del Samurái de la Canción, Pedro Vargas, el presidente electo López Obrador es muy agradecido, muy agradecido, muy agradecido.
Para que no quepa duda emprendió una nueva gira nacional de agradecimiento a los ciudadanos que votaron por él, una amplia mayoría.
Su hábitat natural es la plaza pública, no las oficinas, ni siquiera la presidencial.
Arrancó en Nayarit, donde dijo que cumplirá sus promesas de campaña hasta donde alcance el presupuesto.
Habló de que el país está en bancarrota. ¿Lo está?
El político tabasqueño aprovechó para presentar al grupo que sustituirá al Estado Mayor Presidencial, un grupo de 20 profesionales, 10 hombres, 10 mujeres que constituirán la ayudantía de la Presidencia.
A quienes habrá que desearles muchísima suerte.
Los mariachis ¿matan?
La presencia de grupos de narcomenudistas en Plaza Garibaldi es algo conocido por todos.
Se han publicado en la prensa nacional reportajes en los que se habla de las bandas y sus modos de operar.
¿Por qué la policía capitalina no hace su trabajo y evita las actividades delictivas en ese lugar? ¿No puede o no le conviene evitarlas?
Es un lugar relativamente pequeño que podría estar rigurosamente vigilado con policías uniformados y de civil con herramientas de última generación para garantizar que los ciudadanos que acudan a divertirse no se jueguen la vida.
En el caso de Garibaldi, la policía capitalina está bajo sospecha.
Involución educativa
Con respecto a la reforma educativa hay dos noticias, una buena y otra mala.
La buena es que el PAN resolvió defenderla a capa y espada. La mala es que sus bancadas en el Congreso no podrán contener a la aplanadora de Morena que no quiere dejar ni una coma de la reforma.
De modo que la defensa de la reforma educativa para que tenga algún eco debe hacerse en otro escenario, por ejemplo, el de los medios de comunicación.
Marcelo Torres, actual presidente del blanquiazul, dijo a los medios que México tiene un retraso de 30 años con respecto a los países desarrollados en materia educativa; sin la reforma el retraso se acentuará.
Derogarla será una involución. Pidió dejar de pensar en clientelas políticas pues la campaña ya pasó, y trabajar en serio por el bien de México.