¿La marca de la casa?
Se perfila en el país una nueva política de asignación de obra pública.
Resulta que en Tabasco el Congreso local, de mayoría morenista, resolvió eliminar los procesos de licitación en particular para la construcción de la infraestructura para la refinería comprometida por el Presidente Electo.
La pregunta es si esa política, la de la adjudicación directa en obras de infraestructura, será seguida por otros gobiernos con mayoría de Morena, e incluso a nivel nacional, pues ese partido domina ambas cámaras del Congreso de la Unión.
Lo curioso es que los diputados tabasqueños argumentaron que así se garantiza que las obras las realicen verdaderos expertos y no amigos de los políticos.
Precisamente eso es lo que se busca con las licitaciones. Muy extraño.
Iguala, derecho de admisión
Ha sido bien recibido el compromiso del Presidente Electo y su grupo de hacer lo necesario para conocer la verdad sobre el caso Iguala.
Los primeros complacidos han sido, desde luego, los familiares de los normalistas desaparecidos.
A pesar de lo anterior, se extiende el temor de que el ofrecimiento de abrirle las puertas a todos los organismos internacionales que quieran participar en la investigación resulte contraproducente.
En una referencia dada a conocer por el Senado, más de 20 organizaciones han mostrado interés en participar.
Si se quitan las restricciones y se abren las puertas para todos, este número puede aumentar y generar un caos que impida avances concretos.
Lo más sensato, dicen, es reservarse el derecho de admisión para los organismos con destrezas técnicas comprobadas y sobre todo respetar al Poder Judicial mexicano.
Duarte, jaloneo judicial
Como una estrategia de la Defensa para obtener beneficios, el exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, se declaró culpable.
Lavado de dinero y asociación delictuosa son los delitos que acepta haber cometido, a cambio de una reducción en su condena.
De hecho se dice que el exmandatario podría seguir estos procesos desde la calle.
Acaso por eso se le fincaron otros dos delitos.
Lo que quieren evitar a toda costa es que Duarte salga de la cárcel antes del cambio de gobierno, porque se tomaría como una derrota política.
De manera que el jaloneo judicial seguirá, por lo menos, hasta el cambio de gobierno.
Manzanas podridas
La comunidad empresarial de Guerrero, concentrada en los destinos turísticos de la entidad, aplaudió el operativo de intervención de la policía municipal de Acapulco.
Al reconocimiento siguió una demanda: Que la Secretaría de Seguridad Pública del estado, la Fiscalía y las policías de otros municipios también sean revisadas con lupa.
El cáncer de la corrupción policiaca se ha extendido a muchos otros municipios, por ejemplo, dicen, los de Tierra Caliente donde hay una articulación clara entre delincuentes con uniforme y sin uniforme.
Guerrero es ejemplo irrebatible de los daños sociales que ocasiona la fragilidad de las instituciones encargadas de la seguridad y la justicia.