MORENA EN EL CONGRESO, O REFLEXIONA SU NEGATIVIDAD O MUERE…
La quinteta formada por los diputados locales del Movimiento de Regeneración Nacional, al ser el grupo parlamentario mayoritario en el Congreso de Morelos debe ser propositivo, dejar de actuar como una oposición.
El primer mes de la Quincuagésima Cuarta Legislatura local, el grupo parlamentario de MORENA parece ser oposición y no actúa como lo que es: parte del gobierno y sin un planteamiento formal para ser competitivos social y electoralmente los próximos años.
La sociedad espera más de MORENA que del Partido del Trabajo o de Encuentro Social, debido a que –efectivamente- es el instituto político de Andrés Manuel López Obrador el triunfador de la contienda del pasado primero de julio.
El pueblo de Morelos ya no espera nada de lo que los morenistas hicieron de los viejos y cáducos tres partidos como es el Revolucionario Institucional, el de la Revolución Democrática y Acción Nacional, mucho menos de sus satélites como es el Verde Ecologista y el Socialdemócrata.
La diputación estatal encabezada por Keyla Selene Figueroa Evaristo, debe de ser más política, más diplomática y hasta acercarse más a sus compañeros de los demás grupos parlamentarios y fracciones parlamentarias.
Aun y cuando no es mesa directiva o junta política, MORENA por el mayoriteo de sus opositores, debe dejar de actuar como oposición como ese viejo perredismo en donde todos peleaban por todo y por nada.
Los diputados del instituto político de Andrés Manuel López Obrador deberá demostrar porque hoy son mayoría, con propuestas y con acciones dentro del Poder Legislativo en donde pareciera que fueron a la confrontación con el Ejecutivo que decidieron en coalición fuera su candidato.
A MORENA, hoy le queda más por aportar que por dividir, por tomar posiciones de opositor cuando en realidad ahora son gobierno aun y cuando Cuauhtémoc Blanco haya sido también postulado por el PES.
Los diputados locales y legisladores federales de MORENA hoy tienen la obligación en ética política de respaldar un gobierno que también es parte de ellos, Cuauhtémoc Blanco Bravo si tiene éxito en su administración también lo tendrán los diputados y el propio instituto político.
Eso también lo debe analizar el dirigente de la institución porque así como el pasado primero de julio obtuvieron el triunfo, en los próximos tres años podrían volver a formar parte de la chiquillada.
La diputada Keyla como sus compañeros deben replantear su posición dentro del gobierno, cierto sin incurrir en la sumisión ni en actos de corrupción bajo el famoso proverbio popular: pasar el fango sin mancharse.
Ya los diputados morenistas deben dejar su postura de ser oposición, de forjar un nuevo esquema de hacer política ya no de ser los gritones de la tribuna ni tampoco los que provocan los enfrentamientos.
Cierto es que ninguno de los diputados de MORENA en la realidad tiene experiencia política, ni Héctor Javier García Chávez quien a pesar de ser diputado federal parece que pasó de madrugada en el Congreso de la Unión.
Pero con los errores cometidos en el primer mes -dentro del cargo- todavía tienen tiempo para reflexionar, de asumir posiciones concretas y serias sin enfrentamientos con sus compañeros ni con el Ejecutivo.
Eso también lo debe pensar Rabindranath Salazar Solorio desde su postura como “jefe moral” de MORENA en el estado, en momentos que son necesarios de unidad entre los nativos del estado y sus residentes de buena fe.
Más que buscar la revancha el ex senador, debe guiar a sus diputados y su dirigencia por construir, pero también saber que los errores de un gobierno son de todos los que lo asumieron a un poder.
De ejemplo está Graco Ramírez, por eso su soberbia, errores y hasta imposiciones personales y la de su hijastro Rodrigo Gayosso hoy el PRD es un partido defenestado, que hoy está para el olvido.
De ahí que la diputada Rosalinda Rodríguez, del PRD, y Naida Josefina Díaz Roca, del PSD, también deben reflexionar sobre su posición, debido a que quizá no tengan culpa de quienes las antecedieron en el cargo, pero hoy como morelenses deben construir.
Debemos entrar a la tercera transformación del nuevo Morelos, es deber y obligación de los 20 diputados hacerlo y no solo pensar en una ideología, en asuntos de grupo o personales, ya la comunidad espera resultados. ¡Que así sea!