Dice que el costo de cancelar la obra sería de 100 mmdp de entrada, más las demandas de 307 empresas
Avance. Gerardo Ruiz Esparza, secretario de Comunicaciones y Transportes, dijo que el NAIM tiene un avance de 31.8 por ciento.
CIUDAD DE MÉXICO.
Gerardo Ruiz Esparza, secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), consideró que aunque aún es incalculable el costo de suspender el Nuevo Aeropuerto Internacional de México en Texcoco, terminar de construirlo es más barato, porque requiere de 188 mil millones de pesos adicionales; cancelarlo implicará el pago inmediato de 100 mil millones de pesos, la recuperación del terreno implicará otros “miles de millones de pesos más”, a lo que se sumarían las demandas de 307 empresas afectadas.
Informó a senadores que el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) “avanza”; tiene 31.8% de conclusión, genera 45 mil empleos, y da trabajo a 307 empresas, de las cuales 90% son mexicanas.
Al comparecer ante comisiones del Senado, Ruiz Esparza informó que el Programa Nacional de Infraestructura amplió su inversión de 1.2 a 1.4 billones de pesos.
Aunque fueron varios los temas de interés de los senadores, la mayor parte de preguntas fue sobre el NAIM, porque los legisladores federales explicaron que se trata de una decisión fundamental para el país y es preciso contar con información necesaria.
“Entonces, si se cancela, habría que pagar cien mil millones de pesos: 60 mil millones con cargo al PEF; estos 40 mil millones con cargo al fideicomiso que tiene el depósito del TUA, y de estos créditos que se han pedido.
“Tendría también, en caso de cancelación, que pagársele a los tenedores de bonos la deuda total; implicaría ir sacando los recursos que vayan entrando del TUA al aeropuerto, y todo ese recurso irse canalizando para pagar esa deuda y complementar los seis mil millones más los 30 mil millones adicionales”, detalló.
Ruiz Esparza dijo que cancelar la actual construcción debe “ser un tema de análisis internacional, de análisis de confianza en México, en caso de suceder. Dejo la reflexión de que con 100 mil millones que se deben pagar de inmediato por la cancelación, con 88 mil millones que vendrían del TUA, se podría concluir la obra, de acuerdo con los costos”.
Dijo que, según la firma de ingeniería Parsons, si sigue el proyecto, el aeropuerto se culminaría en diciembre de 2021, aunque debido a las licitaciones suspendidas, podría haber “el efecto de tres meses, tal vez”, de retraso en la obra.
De la consulta de la que dependerá el futuro del NAIM, dijo que es difícil que un ciudadano pueda dar respuesta sobre las corrientes aéreas, sobre las del océano Pacífico o el Atlántico, pues el análisis debe hacerse del aire a la tierra para ver si un aeropuerto es viable, estudiar cómo se da la predominancia de las corrientes, su orientación y cómo cambian en el transcurso del año, con el calor o el frío.
En defensa del megaproyecto del NAIM, ante la Comisión de Comunicaciones y Transportes, que preside el senador Higinio Martínez Miranda, de Morena, Ruiz
reiteró que Santa Lucía no puede operar simultáneamente con el actual aeropuerto por interferencia de espacio aéreo.
Texcoco es el lugar correcto para la construcción de la próxima terminal aérea que requiere la capital del país. “No es la opinión de un servidor público: es la opinión técnica de organismos internacionales, los más importantes para dar conclusiones de esta naturaleza”, argumentó.
“El socavón no fue mi culpa”
Gerardo Ruiz Esparza aclaró a los senadores que no renunció a su cargo, como efecto del socavón en el Paso Exprés de Cuernavaca, porque hacerlo hubiera implicado asumir la culpa, y él no fue el responsable.
Explicó que ha habido 50 socavones en todo el país y nadie ha exigido la renuncia de ningún gobernador, a pesar de que también hubo muertes.
A pregunta expresa de Higinio Martínez, de Morena, Ruiz Esparza dijo que estará atento a la recomendación de la CNDH, pero recordó que el caso ya fue investigado y sancionado.
“Legalmente, el responsable de hacer la obra son las empresas constructoras (...) la responsabilidad política, estoy convencido, era atender las consecuencias”.
Admite SCT que subió costo del tren a Toluca
Las protestas sociales recientes en contra de la construcción del tren rápido México-Toluca provocaron un daño de 28 millones de pesos, por trabes echadas a perder, al no poder colocarlas, informó al Senado Gerardo Ruiz Esparza, secretario de Comunicaciones y Transportes, quien desmintió que el costo haya crecido de manera exagerada, pues del original: 45 mil millones de pesos subió a 54 mil 300 mdp.
Al comparecer ante la Comisión de Comunicaciones y Transportes del Senado, Ruiz Esparza dijo que la SCT tiene previsto un avance de 98% a diciembre de este año en el tramo de 50 kilómetros de Zinacantepec-Santa Fe del Tren Interurbano México-Toluca, pero se puede ver afectada en los tiempos, por las protestas sociales.
Detalló que el último bloqueo social se tuvo el pasado lunes 15, lo que provocó que dos trabes ya en proceso de fraguado se echaran a perder, tomando 15 días más su reposición. Cada trabe de mil 200 toneladas tiene un costo de 14 millones de pesos.
“Nos bloquearon y no dejaron que hubiera trabajadores para empujar fraguadas las trabes a su destino y se tendrán que volver a construir”, apuntó; en razón de esto pueden faltar algunas trabes del tramo para llegar al bitúnel de 4.7 kilómetros.
“Tuvimos un bloqueo de cuatro meses por reclamos sociales que tiene toda obra de esta naturaleza; no es extraño ni debe de extrañar a nadie que se tengan problemas sociales de gente afectada de alguna manera”, respondió a senadores.
Recordó que el Tren Interurbano conectará el Valle de Toluca con el poniente de la CDMX. Su construcción inició en junio de 2015 y se preveía que en 2017 entrara en operación, pero los bloqueos sociales son algunas de las razones que han atrasado la conclusión.