Cuernavaca.— Por carecer de los exámenes de control y confianza, el gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo solicitó al Congreso estatal remover de sus cargos a los fiscales general del estado, Uriel Carmona Gándara, y el Anticorrupción, Juan Jesús Salazar Núñez.
Ambos funcionarios fueron nombrados durante el sexenio del ex gobernador perredista Graco Ramírez y ratificados en sus cargos por la anterior Legislatura para un periodo de nueve años.
Con antelación, el grupo parlamentario del Partido del Trabajo (PT) solicitó la remoción de ambos fiscales por no contar con los exámenes que exige la Ley Nacional de Seguridad Pública para su ingreso y permanencia en el puesto.
Ante estas faltas, los diputados señalaron que denunciarán a ambos funcionarios. Según el legislador José Casas, en el caso de Salazar Núñez no hay registro de sus exámenes desde que asumió el cargo, hace tres años.
Carmona Gándara respondió a los señalamientos y expuso que conforme al artículo 79-B de la Constitución de Morelos, el fiscal general sólo podrá ser removido mediante la solicitud del gobernador, cuando cometa una causa grave que establezca la ley, como los delitos de cohecho y peculado.
No obstante, por la tarde el Fiscal subió una foto a sus redes sociales, donde se le ve en el Centro de Evaluación y Confianza de la PGR para presentar su examen.
La petición del mandatario será turnada a la Junta Política y en esta instancia deberá reunir las dos terceras partes de los votos, para lo cual tienen un periodo de 10 días hábiles, de lo contrario se considerará rechazada.