I. Lo correcto. Después de que Estados Unidos informó al gobierno de México sobre su decisión unilateral y sin previo aviso, de implementar una sección a su ley migratoria que le permitiría devolver a extranjeros, no mexicanos, a México para que aguarden mientras se desarrolla su proceso migratorio en EU, la reacción de la cancillería mexicana, a cargo de Marcelo Ebrard, es loable. El gobierno mexicano autorizará, por razones humanitarias y de forma temporal, la entrada de migrantes extranjeros devueltos por EU. La decisión del país vecino se da un día después de la aprobación por parte de la Asamblea General de la ONU del Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular. La prioridad es el respeto a los derechos humanos, tal como lo demostró el gobierno de México.
II. Regreso a la calma. A través de su cuenta de Twitter, el magistrado José Luis Vargas Valdez, anunció que “en las próximas semanas” presentará denuncias y pruebas de las irregularidades cometidas por Janine Otálora, presidenta de la Sala Superior del TEPJF. Tras hacerse públicas las diferencias entre integrantes del Pleno, rápidamente se reunieron para dirimir diferencias, que fueron resueltas de manera interna, privilegiando el diálogo y fortaleciendo a la institución. El debate transparente, crítico y con diversidad de ideas, reafirma los valores y constituye una forma de consolidar la democracia. Lo importante de este desaguisado es garantizar el Estado de derecho. Se confirma, una vez más, que la mejor política es el diálogo y la unidad. Los pactos siempre rinden mejores frutos.
III. Oportunidad. Mucho se debate en torno a lo que será la Guardia Nacional, no obstante, con 18 votos a favor y 6 en contra, la Comisión de Puntos Constitucionales aprobó, en lo general, la reforma constitucional para su creación. Quienes la promueven afirman que la figura ya estaba en la Constitución, y sus detractores temen que la situación se salga de control. Alfonso Durazo, secretario de Seguridad Pública, rechazó que represente la militarización del país. Explicó que es parte del Plan Nacional de Paz y Seguridad y tiene el objetivo de preservar la seguridad y combatir la delincuencia en el país. Dejemos atrás el nombre y la polémica, y seamos testigos de su efectividad.
IV. Habemus ministro. En segunda ronda, porque en la primera ninguno de la terna alcanzó mayoría, y tras negociaciones con la oposición, el Senado eligió por 114 votos a favor, a Juan Luis González Alcántara, como el nuevo ministro de la SCJN. Abogado con larga trayectoria en el Poder Judicial y académico de la UNAM, fue electo para el periodo 2018-2033. Ayer tomó protesta y el próximo 2 de enero, el Pleno de Ministros le dará la bienvenida, por lo que podrá participar en la elección del nuevo presidente de la Corte. Se le califica como el ministro allegado a la nueva administración federal. “No hay problema si recibo un salario menor”, dijo. No sólo aceptaría bajarse el sueldo, también declaró que el Poder Judicial debe ponerse en orden. La sacudida republicana va para todos.
V. Sin problemas. El exrector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, compareció ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, que lo ratificó como embajador de México ante la ONU. De la Fuente resaltó temas como el mantenimiento de la paz y seguridad, el desarrollo sostenible y la protección, como principios de política de la ONU y “a la vez son principios de México”. Pero lo que mejor parado lo dejó fue su discurso ante el compromiso de atender y cumplir con los acuerdos internacionales en materia de derechos de las mujeres, que deben permanecer en el tope de la agenda, “o el riesgo de la regresión es real”, afirmó el embajador Extraordinario y Plenipotenciario ante la ONU. Tiene un aliado el feminismo mexicano.