I. Estrategia. El exprocurador de Nayarit, Edgar Veytia, se declaró culpable de cargos de narcotráfico en el mismo tribunal donde enjuician a Joaquín El Chapo Guzmán. Tanto él como Guzmán están siendo enjuiciados por distintos casos en la corte federal de Brooklyn. Veytia dijo haber aceptado dinero de los cárteles para ayudarlos a contrabandear cocaína, heroína y metanfetaminas a EU de 2013 a 2017. Hizo arreglos para evitar la captura de narcotraficantes o para que fueran liberados de custodia. El clan, con su compadre, el exgobernador inhabilitado Roberto Sandoval, no acabó bien. Y tienen pendientes aún despojos, levantones y desapariciones durante su macabra administración.
II. Perro no come perro... decían. ¿De qué tamaño estará la malversación de fondos en Tabasco, que Juan Manuel Fócil, senador estatal del PRD, pidió enjuiciar al exgobernador de su mismo partido, Arturo Núñez Jiménez, quien concluyó funciones el pasado 31 de diciembre, en medio de una descomunal crisis hospitalaria y una catástrofe financiera sin precedentes. Luego de que se difundieran fotografías de Núñez paseando en el Zoológico de San Diego, California, con su familia, la indignación y el repudio popular se desató. Su correligionario tachó de “inapropiado que Núñez se ande exhibiendo en el extranjero cuando dejó muy mal al estado”. Sin duda, no le preocupa que hasta en el PRD lo critiquen. El mismo 31 de diciembre partió en un jet privado. ¡Abur!
III. La diferencia. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo público su patrimonio y declaró que no tiene bienes. “Sólo la quinta en Palenque que ya está escriturada a nombre de mis hijos. Tengo derecho a usufructo hasta que deje de existir”, apuntó el mandatario en rueda de prensa que llevó por nombre Cuentas claras y chocolate espeso. En la declaración patrimonial facilitada, se muestra que, efectivamente, no cuenta con nada a su nombre; ni bienes inmuebles ni vehículos. Tampoco tiene adeudos ni conflictos de interés. “Nunca me ha interesado el dinero. Lucho por ideales, por principios”. Ya lo hizo la cabeza de esta administración, ¿qué esperan los demás funcionarios para transparentar los signos de pesos que les ha dejado la vida pública?
IV. Gravedad. Arde Chiapas. El activista por los derechos humanos, Sinar Corzo Esquinca fue ultimado a balazos, en las cercanías de su domicilio, en la cabecera municipal de Arriaga, colindante con Oaxaca. Dos sujetos a bordo de una motocicleta le dispararon a quemarropa cuando caminaba sobre la acera. Momentos antes, Sinar Corzo había sostenido una reunión con el alcalde del lugar del Partido Chiapas Unido, en la presidencia municipal. La Comisión Estatal de Derechos Humanos abrió un expediente y emitió medidas cautelares, ante el homicidio del defensor de derechos humanos. Hace unos meses, el activista denunció haber sido amenazado por el exgobernador Manuel Velasco, por defender a los damnificados del sismo. Por salud social urge se esclarezca. No presuponer.
V. Miedo. Tras recibir amenazas de muerte, Fidela Bernarda Cuenca Fermín, alcaldesa de San Miguel Ahuehuetitlán, municipio de la región mixteca en Oaxaca, renunció al cargo, por lo que fue relevada por el síndico Salvador Daniel Peral Bazán. Con ese caso van dos alcaldesas quienes, tras rendir protesta del cargo, el pasado 1º de enero, dimiten junto con sus suplentes, para ser sucedidas por varones integrantes del cabildo. La primera en renunciar fue Anayeli Huerta Atristain, de Santiago Tamazola. Ante lo que podría tratarse de casos velados de Juanita, mujeres que dejan el poder para cederlo a hombres, o en verdad el temor a las amenazas. El colectivo Observatorio de Participación Política de las Mujeres en Oaxaca advirtió que estará vigilante. La democracia en México, con el agua hasta el cuello.