Corral al Presidente
La semana que terminó trajo consigo la actuación relevante de dos gobernadores de oposición; uno de ellos, la estrella, es Javier Corral.
Corral, hombre que siempre ha sabido manejarse en lo público, detectó el momento exacto para convertir la gira de AMLO por estados fronterizos, en el escenario de un reclamo por el manejo fiscal y hacendario (a base de decretazos presidenciales y sin diálogo con las entidades).
Dicen quienes lo conocen que el gobernador Corral es muy cuidadoso en las frases con las que busca anidar en la memoria de quienes lo escuchan. Ese sería el origen de: “Y, de paso, terminaríamos con ese peregrinar indigno de los gobernadores hacia el centro del país, para pedir de favor lo que en justicia nos corresponde a nuestros estados”.
Jalisco para los jaliscienses
Y si Corral es, antes que nada, alguien que habla al país pensando en su entidad, hay otra figura que opera bajo una lógica contraria: concentrándose a fondo en su entidad, su figura podría repercutir a nivel nacional.
Se trata de Enrique Alfaro. ¿Recuerdan que el candidato puntero en todas las encuestas decidió ir una y otra vez a Jalisco en la recta final de la campaña? Eso podría ser un indicativo de cómo lo ven sus oponente políticos.
Por lo pronto, se ha concentrado en atender todos los proyectos en la entidad que descobijó “la austeridad republicana”. Carreteras, trenes urbanos y presas jaliscienses son su preocupación.
Superdelegados sin gas
La crisis gasolinera parece ser el primer encontronazo de la nueva administración con una realidad que no siempre querrá alinearse con la IV Transformación de la Vida Pública del País.
Si el abasto de los combustibles a las gasolineras, practicada durante años, ha evitado prácticas dilatorias es, seguramente, por el papel incluso excesivo de los automotores en la actividad diaria mexicana.
Pero en afán de asegurar que el producto no sea robado, retenerlo lejos del consumidor no parece ser una buena idea. Y lo peor, abrió la puerta a que los gobernadores se saltaran olímpicamente a los superdelegados de AMLO que sencillamente no sabían que ocurría.
Ni por su perfil de enlace ni por su supuesta participación en temas de seguridad pública (incluyendo acciones atihuachicol);… sencillamente estaban fuera de base.
¡En Guardia!
Esta semana se discute el tema de la Guardia Nacional en foros que, al menos en inicio, no parecen hechos a modo de los morenistas.
Hacen bien en no simular un diálogo y entrarle al debate, después de todo, lo que se propone es cambiar el paradigma de la seguridad pública en México. En lugar de corporaciones civiles, basadas en la ciencia pericial, buscaremos fuerzas militares disciplinadas…
Algunos de los participantes en el foro están muy interesados en preguntar a los morenistas en qué papel quedará la presunción de inocencia, la investigación científica y la preparación de juicios orales con militares de por medio.
¡Suerte con eso!