La secretaria de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, Gabriela Cuevas, señaló que la política exterior del gobierno anterior que implicó condenar al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, si bien pudo acertar al poner énfasis en la necesidad de actuar, al final tuvo errores.
“La política exterior de México condenando el régimen de Maduro, pudiera haber acertado en la necesidad de actuar en Venezuela pero se equivocó en las razones y en la estrategia”, dijo en entrevista.
En ese sentido, consideró que debe haber una oportunidad para ver si el nuevo gobierno y su política pueden convocar a un diálogo entre las distintas expresiones que hay en ese país.
La Razón buscó a la también presidenta de la Unión Interparlamentaria para conocer su opinión sobre la negativa de México a sumarse a la propuesta del Grupo de Lima de condenar la reelección del presidente Maduro con el argumento de que nuestro país “promueve firmemente el diálogo con todas las partes involucradas para encontrar la paz y la reconciliación”.
El grupo, conformado por 14 países, ha sido en los últimos años el vehículo de cuestionamiento al régimen chavista.
Consideró que “México no puede ser indiferente a la situación que se vive en Venezuela” y en ese sentido se refirió al comunicado emitido por la Cancillería mexicana el pasado 4 de enero que, apuntó, fue claro respecto a la “necesaria protección de los derechos humanos” en ese país.
Sostuvo que debe darse una oportunidad para ver si el nuevo gobierno puede abrir canales de diálogo en esa nación como se lo ha planteado.
“Habrá que dar oportunidad a ver los resultados de esta nueva estrategia y si, en efecto como menciona el comunicado, el gobierno de la República puede convocar a ese urgente diálogo entre las distintas expresiones en Venezuela”, manifestó.
En respuesta a posturas críticas de integrantes de Morena sobre la permanencia de México en el Grupo de Lima, llamó a que nuestro país no salga, aun cuando, se ha señalado, éste podría estar virando, tras las renovaciones de gobiernos en Latinoamérica, hacia posiciones más de derecha.
“México no debe abandonar el Grupo de Lima. Sí, ha habido cambios políticos en la región, pero el deber de la diplomacia es generar los puentes necesarios con todas las naciones, independientemente de la ideología de sus gobiernos”, apuntó.
- El Dato: En mayo de 2018, el Grupo de Lima desconoció las elecciones venezolanas, en un oficio que firmó México aún durante la administración de Enrique Peña Nieto.
Señaló que la construcción de una América Latina y el Caribe en unidad, diálogo y cooperación “es urgente y debe ser una prioridad de la política exterior”.
Respecto a la actitud de Estados Unidos de llamar a condenar al régimen de Venezuela, mencionó que el vecino del norte “mantiene un doble discurso”, pues por un lado inyecta recursos por la vía de la compra de petróleo al gobierno sudamericano y por otro, exige sanciones en su contra.
DEBATE. Ayer, en la sesión de la Comisión Permanente se manifestaron posiciones divergentes. El presidente de la Mesa Directiva, Porfirio Muñoz Ledo, aseguró que nunca se ha permitido la injerencia y apuntó que “jamás se debe opinar sobre las elecciones de otro país”.
La diputada del PRI Dulce María Sauri consideró necesario exhortar a la SRE a encontrar una solución negociada, pacífica y democrática a la crisis multidimensional en Venezuela. La vicecoordinadora de diputados del PRD, Verónica Juárez, resaltó que México no puede simplemente decir que los principios de política exterior le impiden tomar una posición respecto de la situación de derechos humanos allá.