No hay pretextos
Olga Sánchez fue a la plenaria de los diputados de Morena con un mensaje personal del presidente López Obrador:
La Cuarta Transformación requiere sustento legal y ésa es la chamba de los legisladores del partido en San Lázaro.
La construcción de un andamiaje legal que norme los cambios que se han anunciado es crucial y urgente. Se esperan resultados concretos en el periodo ordinario de sesiones.
En Palacio Nacional confían en que Morena y sus aliados de la colación Juntos Haremos Historia, que tienen una cómoda mayoría, hagan el trabajo político necesario para impulsar, incluso, cambios constitucionales.
A Mario Delgado le tocó firmar el acuse de recibo del mensaje presidencial.
Minirebelión apagada
Se apagó la rebelión de cuadros morenistas en Puebla.
La línea es clara y no admite réplicas: el candidato fue, es y será Miguel Barbosa.
La demanda de abrir el abanico de posibilidades no prosperó.
Los suspirantes que levantaron la mano la tendrán que bajar porque la dirigencia nacional no se movió un ápice y cumplirá la instrucción: Repite Barbosa, me canso ganso.
Sin verificar
Justo en el momento que más se les necesita, a la mitad de la crisis de la gasolina, la Profeco presenta un déficit de supervisores para revisar el funcionamiento de las gasolineras en el país.
Hay denuncias de arreglo de bombas para que cobren más e incluso manejo irresponsable de bidones, pero los supervisores de la Procuraduría brillan por su ausencia.
Si la ausencia obedece a medidas de austeridad, estamos ante un ahorro que puede salir muy caro.
Oportunidad para la diplomacia
La nueva política exterior mexicana está a prueba.
Del resultado de la crisis de Venezuela dependerá si la estrategia se ajusta o se profundiza.
El eje rector de la estrategia no es nuevo, sino antiguo, se trata de la Doctrina Estrada de la no intervención.
Lo que no impide que México realice un esfuerzo para ser mediador y que la crisis tenga una salida negociada. En esto está acompañado de Uruguay.
Ambas naciones convocaron a una reunión en Montevideo, donde piensan congregar a los organismos internacionales y a países que tengan una posición neutral.
La apuesta es que la diplomacia haga el trabajo y no la fuerza.
Dinero habla
La multianunciada compra de pipas o autotanques por parte del gobierno federal para aumentar el transporte de gasolinas por carretera y evitar así el desabasto que causó el cierre de ductos en su lucha contra el robo de combustible, sólo ha quedado en palabras.
Y es que hasta el momento el gobierno no ha firmado el contrato de compra-venta ni mucho menos ha dado un peso para que la industria arranque la producción de estas pipas.
Entre los productores hay incertidumbre.
Saben que puede venir un cambio de señales y prefieren esperar a que se firme el contrato, pero sobre todo que haya un anticipo que respalde la compra... ¡No vaya a ser!