Lozoya, se estrecha el cerco
El que debe estar muy preocupado es el exdirector de Pemex Emilio Lozoya Austin, después de que el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador pidiera al fiscal general Alejandro Gertz Manero que se transparentara toda la investigación relacionada al caso Odebrecht, una trama en la que el nombre del exfuncionario ha sido mencionado más de una vez, sin que hasta el momento se haya avanzado. Pero el caso Odebrecht no sería su única preocupación, pues la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda tendría en la mira al abogado Omar Olvera, quien presuntamente se benefició de su cercanía con Lozoya para obtener información privilegiada de los clientes de la empresa productiva del Estado, además de su posible involucramiento en delitos como lavado de dinero. ¿Saldrá indemne el exdirector de Pemex?
La descalificación
Resulta preocupante que el presidente de la Mesa Directiva del Senado, Martí Batres, y por tanto representante del Poder Legislativo haga comentarios como los que realizó a través de su cuenta de Twitter en contra de los órganos autónomos como la Comisión Reguladora de Energía (CRE), la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y la Comisión Federal de Competencia (Cofece) a los que señaló de ‘fortalecer consorcios privados frente a las empresas públicas’, y más preocupante aún es que esta ofensiva no es nueva ni es un hecho aislado, pues el mismo presidente López Obrador se ha manifestado contra estos entes, el último, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), apenas la mañana de ayer. Al parecer los integrantes de la cuarta transformación lo están convirtiendo en un tema personal.
Inglés no es prioridad
La enseñanza del idioma inglés en los planteles educativos públicos no es una prioridad, tal y como se ve reflejado en Colima, donde el Gobierno estatal ha dado a conocer que la federación ha cerrado la llave de los recursos para el pago para los docentes de esta materia pertenecientes al programa de Escuelas de Tiempo Completo, y el estado solo puede cubrirlo hasta finalizar el año escolar. Lo que hay que recalcar es que no es un tema por el que se pueda responsabilizar solo a la actual administración federal, pues ya desde hace varios meses, incluso años, se han venido denunciado deficiencias en este programa como falta de docentes, y la falta de pagos, por lo que este no se había desarrollado en plenitud. Sería interesante conocer la postura del titular de la SEP, más allá de asegurar que para aprender el idioma no se necesita dominarlo.