1. Promesa. Una vez más, el alcoholímetro se convirtió en la fosa de un elemento policiaco. Por evadir la prueba de alcoholemia, el fin de semana, un conductor arrolló a un policía de la Ciudad de México y le quitó la vida. El responsable sigue prófugo. “Es algo que yo le quiero prometer a la viuda del elemento, vamos a encontrar a esa persona y va a pagar”, señaló Jesús Orta Martínez, secretario de Seguridad Ciudadana. La jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, asegura que hay que redoblar esfuerzos para abatir la inseguridad. Suena muy bien, ¿pero si no pueden proteger las zonas donde decenas de policías están desplegados, cómo protegen el despoblado?
2. Reformas a la medida. En el intento de transformar al país ninguna de las voces debe quedar fuera. Y de eso es de lo que se encarga Mario Delgado Carrillo, el líder de la bancada de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en San Lázaro. Frente a la petición de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) para que los legisladores corrijan la Reforma Laboral, Delgado defendió que los cambios a la legislación son “una buena noticia” no sólo para los trabajadores sino para los empresarios. Argumentó que la reforma busca proteger también a los empresarios, porque “ya no serán más extorsionados por líderes charros”. Si acaban con líderes abusivos, que nunca velan por los intereses de los trabajadores, que la historia se los reconozca. Y si no, se los demande. Así de sencillo.
3. Ya les cayó. El presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró que la corrupción no tendrá espacio en su gobierno y pidió a los ciudadanos no desesperarse sobre recibir los apoyos económicos de programas sociales, pues dijo que “no es fácil echar a andar al gobierno, porque era un elefante que estaba echado, reumático y magoñoso (...) Y hay que pararlo y empujarlo para que camine porque es un cuerpo de avance lento, pero ahí lo estamos empujando y entre todos va a tener que caminar porque lo vamos a empujar todos”. Hoy dará a conocer la lista de cuáles gasolinerías en todo el país venden más caro el combustible, pues señaló que el precio de 19 pesos por litro “es un abuso”. Aseguró que se les entrega a 16 pesos y están vendiendo en 19 y a 20 pesos. Por lo visto, en esa lista estarán todas las estaciones de servicio. ¿O usted conoce una que se salve?
4. Agilícense. Excélsior publicó, el pasado 19 de marzo, que en sus primeros seis meses, la primera legislatura del Congreso de la CDMX aprobó sólo 12% de las iniciativas presentadas en el pleno: sólo 41 de las 318 iniciativas se convirtieron en ley. El líder de la Jucopo, Ricardo Ruiz, dio a conocer que estaban por analizar de qué forma se podían “limitar los tiempos que le estamos dedicando a los puntos de acuerdo y concentrarnos más en dictámenes”. Para ser más asertivos vienen otros cambios, como privilegiar la presentación de iniciativas y dictámenes, además de reducir el número de puntos de acuerdo. Si con esto no despiertan, nada los hará salir del letargo.
5. Popularidad, cero. Jaime Rodríguez Calderón ha luchado afanosamente, semana a semana, para ubicarse en el sitio que ayer le otorgaron sus gobernados. El seudomandatario, como lo calificaron, fue protagonista de una manifestación sui géneris. Integrantes de Únete Pueblo y otras organizaciones civiles quemaron un muñeco que representó la figura del gobernador. Encabezados por la activista Rocío Montalvo, se mostraron en contra del alza en las tarifas de las rutas camioneras y del Metro, pero también se quejaron de las transas y corrupción que, aseguraron, prevalece en el gobierno estatal. “Ni Jaime ni Bronco, ya estamos hasta el tronco”. Sin (más) palabras.