Trece personas —cinco mujeres, siete hombres y un menor de edad— han sido asesinados este viernes en un ataque que un grupo armado perpetró en una fiesta privada en Minatitlán, un municipio al sur del estado mexicano de Veracruz, según han informado las autoridades locales a la agencia Efe.
Los hechos ocurrieron a las 21:00 horas en una región petrolera duramente golpeada por la delincuencia organizada. Los testigos de los hechos señalaron a la prensa local que unos hombres armados ingresaron a una fiesta privada que se llevaba a cabo en la palapa (restaurante) La Potra, ubicada en la colonia Obrera de la cabecera municipal. La información oficial cuenta que los agresores irrumpieron en el local preguntando por un hombre conocido como como El Beky, pero los asistentes intentaron impedirlo, por lo que fueron atacados a tiros y acribillaron a las 13 personas. Hay además tes hombres y una mujer heridos, según un comunicado que han emitido las autoridades estatales.
El Beky es señalado como propietario de un bar ubicado en el municipio de Minatitlán, según ha informado la policía local a la agencia Afp. El Gobierno ha desplazado al Ejército mexicano, a la marina y a la Policía Estatal, quienes han montado un operativo para dar con los autores del ataque. Aunque de momento, no hay ningún detenido.
La ciudad de Minatitlán, donde se asienta una refinería, ha sido golpeada por la violencia en la última década y el principal delito que se comete es el de secuestro en contra de petroleros, doctores, maestros y ganaderos.
En Veracruz, según áreas de inteligencia de la Secretaría de Marina y del Ejército Mexicano, se disputan el control de la zona los carteles de Los Zetas, Cartel Jalisco Nueva Generación y El Golfo. Un territorio clave en el tráfico de drogas, el huachicol (cuenta con cuatro Petroquimicas y una refinería), el tráfico de personas, el cobro ilegal a comerciantes (derecho de piso) y el secuestro, en un municipio de alta producción agropecuaria, petrolera y con uno de los puertos de carga más importantes del país.
En diciembre de 2018 llegó al poder el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, del partido Morena, del mismo partido en el gobierno federal, con la promesa de disminuir en un periodo de dos años los altos niveles de violencia.
Una de las primeras acciones para pacificiar al estado de Veracruz fue el reconocimiento de miles de desaparecidos, se calcula unos 5.000, y la búsqueda e identificación de desaparecidos en fosas clandestinas.
En los últimos ocho años se contabilizan de manera oficial al menos 601 fosas clandestinas en territorio veracruzano, con 518 cuerpos, 560 cráneos y 53.606 fragmentos de cuerpos de personas, tanto hombres, mujeres y niños. Entre esas fosas se encuentra la conocida como Colinas de Santa Fe del puerto de Veracruz, donde fueron localizados 298 cuerpos de personas sepultadas de manera ilegal por delincuentes.