Tres clases de delincuencia
De todos los delincuentes que hay, los políticos delincuentes son los más peligrosos y nocivos.
Tres clases de delincuencia
Los últimos años han sido trágicos para México en materia de seguridad; en los últimos meses el problema se ha acentuado notoriamente en casi todas las modalidades de delito. Según el Semáforo Delictivo, en Marzo del 2019 los ilícitos cometidos en este mes superan en diez por ciento los ocurridos en el mismo periodo del año anterior. México y casi todos los estados del país se han vuelto violentos, se cometen todo tipo de infracciones y la capacidad de respuesta de la policía ha sido superada por las bandas criminales. En nuestro país y en los estados existen tres clases de delincuencia.
El problema delictivo es agobiante, pega a todos los sectores de la población, afecta el modo de vida de los ciudadanos y altera de manera sustantiva la marcha de las instituciones públicas y privadas. La criminalidad parece estar fuera de control y la capacidad de respuesta del estado está muy por debajo del nivel de operación, equipamiento e inteligencia de los criminales.
Pero el problema delictivo del país no es tan simple como observar un duelo entre policías y ladrones, frente a nosotros hay tres tipos de delincuencia que operan a sus anchas y han tomado como rehenes a la sociedad: la delincuencia común, la delincuencia organizada y la delincuencia gubernamental.
En México se cometen distintos tipos de delito y casi todos van en aumento; de acuerdo al reporte de Semáforo Delictivo los estados de Guanajuato, México, Baja California, Jalisco, Chihuahua, Guerrero y Ciudad de México encabezan la comisión de homicidios; Veracruz, México, Puebla, Ciudad de México, Morelos y Guerrero están en el top de secuestros; México, Ciudad de México, Jalisco, Veracruz, Nuevo León, Tabasco y Zacatecas tienen el mayor número de extorsiones; en Baja California, Coahuila, Guanajuato, Chihuahua, Ciudad de México, México y Nuevo León hay más narcomenudeo; México, Jalisco, Baja California, Ciudad de México, Puebla, Michoacán y Veracruz son las entidades en las que más se presenta el robo de autos; en Jalisco, México, Ciudad de México, Baja California, Querétaro y Quintana Roo hay más incidencia de robo a casa; en la Ciudad de México, Jalisco, México, Guanajuato, Veracruz y Baja California hay más robo a negocios; y Veracruz, México, Sonora, Puebla, Nuevo León, Chihuahua, Jalisco y Tabasco encabezan la lista en materia de feminicidios.
Pero aunque se miden igual y los datos que presentan las diferentes instituciones públicas y privadas son válidos, lo que vale la pena revisar es qué hay detrás de los delitos. Algunos forman parte de la delincuencia común, la que pega cada día al ciudadano y cuyo combate corresponde a los municipios y al estado; otros son el resultado de la delincuencia organizada que trafica droga, pero de unos años a la fecha ha diversificado su actuación y roba autos, trata de personas, secuestra, cobro piso, y extorsiona.
Pero por encima de estos dos ilícitos hay una delincuencia más peligrosa que las dos anteriores: la delincuencia gubernamental. La complicidad y la omisión son una parte sustantiva en la comisión de delitos, es la forma de operar de autoridades y representantes populares, es el primer y más fuerte escudo de quienes violan la ley y el gran impedimento para que las cosas mejoren en los estados y en el país.
Una y mil veces hemos visto en la historia que las autoridades, los representantes populares y los partidos políticos están vinculados a grupos criminales, les brindan protección y en algunos casos hasta los postulan a cargos de elección popular. Es secreto a voces: el ciudadano común sabe qué gobiernos facilitan la actuación criminal, quiénes mantienen relación con grupos delictivos y qué personajes forman parte o están financiados por la delincuencia organizada.
¡Que denuncien! Rezan incansablemente las autoridades como una formas de exculpar sus pecados. ¿Ante quién? Respondería el ciudadano común que es víctima de la delincuencia en la calle o el empresario extorsionado.
Desde hace años las instituciones públicas carecen de credibilidad y con justa razón: las autoridades se la pasan declarando que el crimen ha penetrado las instituciones, que los policías están asociados con los criminales y que algunos delitos se realizan con el beneplácito de ciertos gobiernos. Con qué confianza denunciar cuando se conoce por el propio gobierno que la policía está rebasada, que la fuerza del estado no es suficiente para combatir a las bandas delictivas y que muchas veces las denuncias se convierten en el camino para que los bandidos tomen venganza contra quienes los acusan.
¿Cuántas veces no ha sucedido que el ciudadano presenta una queja y son las propias autoridades de la Fiscalía las que recomiendan “no moverle porque saldrá peor” porque el delito que se denuncia tiene el auspicio de un gobierno, un político o un partido? ¿Para que desperdiciar varias horas con un agente del ministerio público a quien no le importa el dolor o enojo de quien presenta la denuncia y cotidianamente victimiza al denunciante? ¿Para qué perder tiempo, hacer corajes o padecer una doble victimización con autoridades a quienes no les importa castigar a los culpables y muchas veces con su actuación lo que realmente hacen es protegerlos?
Ahí empiezan el verdadero problema de inseguridad y violencia en México, con la indolencia, incapacidad y complicidad de las autoridades. Es imposible que el problema se resuelva sólo con la fuerza del gobierno, sin la participación de los ciudadanos, pero es imposible que el ciudadano participe en esta lucha cuando no confía en las instituciones porque las considera cómplices de los delincuentes.
Piensa un momento lectora lector querido: ¿Haz escuchado alguna vez que tus autoridades (de los tres niveles de gobierno) son cómplices de la delincuencia? ¿Confías en la honestidad de quienes están al frente de la policía o de las distintas instituciones encargadas de perseguir el delito o procurar e impartir justicia? ¿Tienes la certeza de quienes te representan en las cámaras legislativas o están al frente de un partido político son personas probas, que no tienen vínculos con la delincuencia ni protegen a algún criminal?
La delincuencia gubernamental es la más fuerte y peligrosa de todas, está presente en las instituciones de los tres niveles de gobierno y en los tres poderes del estado, se ve en forma de político que auspicia grupos criminales y también se observa en representantes populares millonetas que hacen del dinero su principal herramienta de promoción personal. Y qué decir de partidos políticos que se han convertido en la herramienta de grupos criminales y prestan sus siglas para que narcotraficantes o asesinos ocupen un cargo de elección popular.
He ahí el problema más grande en la lucha contra la delincuencia. Son los políticos delincuentes que defienden criminales, protegen a los cárteles de la droga y están sentados en las mesas donde se analizan las estrategias para combatir el delito. Son ellos quienes informan a los pillos sobre la manera como se les quiere combatir desde el estado.
La delincuencia gubernamental (y política) es la peor y más peligrosa de toda, es por ella que el ciudadano no confía en las autoridades y por lo cual ninguna estrategia funciona.
Aquellos que desde el gobierno verdaderamente quieren retornar hoy la paz en el estado y en el país tienen un problema muy grave: duermen con el enemigo.
- posdata
El apellido se hizo famoso en Cuernavaca por los excesos de uno de sus integrantes, por la forma como actuó en el gobierno anterior y la manera como lucró con la salud de miles de personas.
Andrik Ruíz de Chávez fue el responsable de las compras y los contratos en la Secretaría de Salud durante el gobierno de Graco Ramírez, a él se le atribuyen adquisiciones a sobre precio, sin licitación, a un mismo proveedor y lo más grave: la compra de medicamento falso o adulterado.
Igual que Sergio Beltrán Toto en Obras, Andrik Ruíz de Chávez se movía con absoluta discrecionalidad en la Secretaría de Salud; no tomaba opiniones de sus superiores, reportaba a una sola persona y actuó muchas veces al margen de la ley, porque se sabía todo poderoso en ese sexenio.
Muchas veces se denunció la manera como actuaban, pero es hasta hora que se están documentando los excesos. Es precisamente por ello que Andrik Ruíz de Chávez está en la mira del nuevo gobierno y representa uno de los objetivos principales de la administración en materia de combate a la corrupción.
Pero hacer negocios en el gobierno no es lo único que hacen los Ruíz de Chávez. Recientemente se hizo público que la familia obtuvo más de 40 concesiones para comercializar en México productos derivados de la marihuana.
Así declara Janko Ruíz de Chávez, hermano de Andrik, a Publimetro:
“La oferta de productos fabricados con las sustancias activas de la marihuana y cannabis sigue en camino luego de que la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) liberara 57 opciones para introducir al mercado mexicano.
Janko Ruiz de Chávez, director operativo de CBD Life, una de las empresas autorizadas, comentó que ya cuenta con 21 productos derivados de la cannabis, uno de ellos patentado con el nombre de Mariguanol.
Aseguró que se mantienen en constante desarrollo para innovar y ofrecer más opciones de este tipo.
¿Cómo se sienten con esta liberación de productos a base de cannabis?
– Estamos muy emocionados de empezar con todo esto y muy agradecidos de tener la oportunidad de poder trabajar con el ingrediente. Además, a partir de esto CBD Life va a hacer un programa de donación a dos mil pacientes durante todo el año para intentar atender sus diferentes males y darle su seguimiento para saber cómo está ayudando el ingrediente a la población.
¿Cuáles son los últimos tres últimos productos que obtuvieron permiso para comercialización?
–El primero es Foria, un aceite con propiedades para ayudar a pacientes con dolor en articulaciones; así como dos versiones de Mariguanol, que es un producto de uso cosmético. El Mariguanol normal contiene cannabidiol (CBD) y Mariguanol Max, que además de CBD posee Tetrahidrocannabinol (THC), que es especialmente efectivo, según estudios químicos para las reumas, dolores e inflamación. Nuestra intención es llegar a todos los puntos de venta del canal normal e informal, lo que quiere decir conveniencia, retail (comercio minorista), farmacéutico, plataforma de venta en línea y el canal tradicional.
¿Qué tan avanzados van con esta liberación reciente de este tipo de productos?
– Los que tenemos autorizados y con permiso de vender son productos derivados de la cannabis con menos de 1% de THC, siempre y cuando nos sean fumados ni vaporizados. Eso nos da una posibilidad amplia de trabajar y explotar los beneficios de todos los Cannabidoides y del Tetrahidrocannabidol hasta 1%.
¿Cuántos productos a la venta tienen?
–Tenemos 21 productos en total y es la línea farmacéutica, CBD Live: cuatro tinturas, tres pomadas, tres productos de cápsulas y dos gomitas multivitaminicas. De la línea de bebidas energéticas son dos marcas, California Drinks CBD, que es té negro y limonada con CBD y Rocket Hi, que también contiene cafeína. Cuenta con té verde, guaraná, gingsen, con base de betabel, además está libre de gluten. Y algo muy importante es que va a costar exactamente lo que la competencia.
¿Qué opinas de la despenalización de la marihuana para uso recreativo?
– La iniciativa de la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, en lo personal, me parece muy respetable y estamos a favor de la legalización, despenalización, auto cultivo, cultivo y comercialización de todo lo que es el cannabis y esperemos que se dé muy pronto.
¿Cómo acercarse al público para ofertar productos a base de una planta con tantos tabúes?
– Existen tanto tabúes como aceptación en el país, pero lo que nosotros queremos es tener una población informada. Nuestro trabajo es el de comunicar y difundir los beneficios y las diferencias entre los distintos cannabinoides de la planta y ya será una decisión personal el comprar y probar los productos.
¿Dónde encontrarlos?
– Son de libre venta como cualquier suplemento alimenticio, alimento, bebida o cosmético.
¿De dónde viene su materia prima?
– El origen de nuestros productos comienza en Colorado, Estados Unidos, donde se encuentran los campos orgánicos de “cannabis sativa L” y desde donde nuestro extractor trabaja para poder hacer nuestro producto terminado. Es importante tener en mente que está muy cuidado y vinculado el registro desde la semilla, la planta, el producto terminado y el consumidor final.”
- nota
Si no encarcela a los graquistas, el gobierno de Cuauhtémoc Blanco habrá fracasado en todos los aspectos.
a de Salud durante el gobierno de Graco o usufructde uno de sus integrantes, por la forma como opercomitiva, con muchas personas
- post it
José Manuel Sanz se entrevistó con el Obispo de Cuernavaca para informarle las acciones que lleva a cabo el estado para combatir a la delincuencia y mejorar la seguridad en el estado. Fue una reunión cordial, con el objetivo de sumar esfuerzos y mostrar la apertura que tiene el estado en este y otros temas.
El problema es mayor y requiere de la participación de todos los sectores para su solución. En Morelos la iglesia es un factor clave. Dialogar con el obispo sobre el tema es una manera inteligente de afrontar la situación.
- redes sociales
¿En qué o en quién confían las redes sociales?
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