Que mejor sí consensúa, dice el Cuau

›Donde ya se dieron cuenta que para enfrentar la grave crisis de inseguridad es necesario buscar consensos y dar la cara, es en Morelos. Ayer, el mandatario de esa entidad, Cuauhtémoc Blanco, firmó tres convenios de colaboración con la Comisión Estatal de Seguridad Pública, la Fiscalía General del Estado, la Secretaría de Gobierno y la Secretaría de Movilidad y Transporte. Y no es para menos, pues el homicidio de dos líderes de la CTM, a plena luz del día, a la vuelta de la oficina del góber evidencia la impunidad y facilidad para matar en ese estado. Quizá por eso Cuau hizo énfasis en que hoy, más que nunca, “hay que unir esfuerzos”.

Guanajuato, entre violencia e impunidad

›El que un día sí, y el otro también, está en boca de todos, es el gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez, pero por los casos de violencia que cotidianamente se convierten en reflector. Ya sea por multihomicidios, policías asesinados o líderes ejecutados, la entidad está presente en todo momento en el escenario nacional, y no sólo por lo dramático de los casos, sino por las constantes amenazas que los grupos criminales hasta cuelgan en mantas; y la impunidad que impera al momento de aplicar la ley y hacer justicia. Y eso que el mandatario panista ratificó en el cargo de fiscal a su viejo colega de gabinete, Carlos Zamarripa, quien con 10 años en ese puesto se supone es súper experimentado en la materia… que si no.

Germán Martínez, con mano firme

›Quien está decidido a meter en cintura a los partidos políticos que omitieron realizar el pago de sus cuotas obrero-patronales, es el director del Instituto Mexicano del Seguro Social, Germán Martínez. Ayer les recordó que existe una carta-invitación para que de manera voluntaria corrijan las irregularidades; además les indicó que pueden pedir una ampliación de hasta por dos semanas para ponerse al corriente de sus adeudos; pero eso sí dejó en claro que “no les vamos a perdonar un solo centavo”. Y ojo, en caso de que los partidos no aprovechen, “habrá una fiscalización más agresiva”.

Une a políticos… ¡el sargazo!

›Lo que son las cosas, aquello que la política no ha podido unir lo está haciendo el sargazo. Porque el problemón que tienen en Quintana Roo movilizó a la iniciativa privada y a los alcaldes de distintos partidos para hacerle frente por sus propios medios mientras que el gobernador perredista, Carlos Joaquín González, les busca dar certeza con el plan estratégico que se arma con la Federación. Por lo pronto la morenista de Cancún, Mara Lezama, trabaja de la mano con hoteleros y prestadores de servicios turísticos para apurar en la limpieza de las playas; en tanto que la priista de Puerto Morelos, Laura Fernández, comenzó con la instalación de barreras marinas; y el panista de Carrillo Puerto, José Esquivel, junto con académicos, busca alternativas para darle utilidad al alga. Ojalá dure el amor.

Jalón de orejas a delegados federales

›Recordando la analogía del elefante reumático que hiciera el Presidente Andrés Manuel López Obrador, ayer el mandatario dio un buen jalón de orejas a los delegados federales, pues los programas sociales están tardando mucho en llegar. Se sabe que en la reunión que tuvo en Palacio Nacional, el llamado fue particularmente para estos servidores, a quienes exhortó a dejar sus escritorios y recorrer el país para escuchar y atender a los ciudadanos. Y no es para menos, pues los programas sociales son la pieza clave contra la delincuencia en la 4T y fue el propio mandatario quien dio un plazo de seis meses para mejorar resultados.

Que sí hay crimen en NL, pero no es delincuencia

›Pues que dice el secretario de Seguridad neoleonés, Aldo Fasci, que durante el partido del clásico Tigres-Rayados se registran más homicidios, peeero, aclara que no tienen nada qué ver con la delincuencia ¿? Y es que para el encargado de bajar el crimen y dar mayor seguridad a los ciudadanos de la entidad, los homicidios se dan por la frustración que sienten los seguidores del equipo perdedor. Lo que ya no sabemos es que si supuestamente no se deba al crimen organizado, sino a un asunto de “emociones” por ver perder a su equipo favorito, sea un alivio o no para quienes habitan la entidad.