Los decesos se registraron en Nochixtlán y Tehuantepec, donde las fuerzas policiacas liberaron carreteras bloqueadas por la CNTE. Lesionados, tanto civiles como agentes
Miembros de la CNTE e integrantes de organizaciones civiles que apoyan a la Sección 22, se enfrentaron con elementos de la Policía Federal y estatal de Oaxaca, con saldo preliminar de seis personas muertas (cifra que fue confirmada por la noche en un comunicado conjunto por los gobiernos federal y de Oaxaca), 54 civiles heridos, así como 41 policías federales (tres de ellos por arma de fuego), 14 policías estatales (cinco por bala), y al menos 21 detenidos.
Los hechos se sucedieron luego de que las fuerzas policiacas liberaron la supercarretera Oaxaca-México, la carretera federal 190 y otras vías que se hallaban bloqueadas desde el domingo en diversas regiones del estado, en especial Nochixtlán, y en el Istmo de Tehuantepec, otro punto donde se tuvo información de decesos.
En los violentos choques, en los que la fuerza pública tuvo que emplear gases lacrimógenos, los manifestantes incendiaron dos tráileres en Nochixtlán. Dos autobuses de pasajeros sufrieron la misma suerte en Juchitán, además de que se saquearon negocios y la policía fue atacada con bombas molotov, palos y piedras.
En el comunicado conjunto la cifra fue de 108 heridos, entre civiles y policías. Algunos fueron trasladados a hospitales como el Aurelio Valdivieso, el IMSS y otros cercanos.
En el hospital de la ciudad se atendió a algunos, pero la gravedad de las lesiones ameritó su traslado vía aérea a otros nosocomios.
LIBERACIÓN DE CARRETERAS. Este domingo a las diez de la mañana las fuerzas federales se desplegaron en la carretera federal Oaxaca-Mexico, en Nochixtlán, en donde fueron enfrentadas por docentes apoyados por presuntos padres de familia y grupos sociales simpatizantes. Pasadas las 17:00 horas, la situación aún era tensa y persistía el bloqueo tanto de la supercarretera como de la carretera federal.
Versiones no oficiales hablan de que los uniformados fueron tiroteados por un grupo de integrantes de la organización denominada CODEP.
La refriega habría generado lesiones de consideración a un policía estatal que recibió un disparo en el muslo derecho; otros dos resultaron descalabrados y uno más con un golpe en la mandíbula, provocado por una piedra lanzada desde el otro bando.
Se identificó a miembros de organizaciones sociales identificadas por las siglas FPR, FIOC, COMUNA y MAIZ, cuyos integrantes están montados en el movimiento magisterial y en parte son los responsables de la ola de violencia contra negocios.
Producto de este enfrentamiento, tres seguidores del movimiento magisterial sufrieron lesiones que derivaron en traumatismos craneoencefálicos, posiblemente por las piedras.
El operativo policiaco generó que el estadio de beisbol Eduardo Vasconcelos fuera habilitado como una terminal aérea y médica para el traslado de lesionados.
DESTROZOS. En el trayecto, la turba se acercó a las oficinas de Caminos y Puentes Federales ubicadas cerca de la caseta de cobro de Huitzo, en donde destrozaron el mobiliario y a dos camionetas, propiedad de la misma dependencia, les prendieron fuego.
La resistencia de las organizaciones sociales montadas en el movimiento magisterial permitió extender los enfrentamientos más allá de tres horas, hasta que el contingente de policías se acercó al siguiente punto bloqueado y el principal acceso a la capital: Hacienda Blanca, en el municipio de Etla, en donde igualmente se registraron enfrentamientos.
Aquí, los inconformes quemaron decenas de llantas, un camión del servicio urbano, un tráiler con caja vacía, barreras del metrobús y otros objetos; humo de los incendios se podía observar a kilómetros de distancia, sobre todo por la cantidad de llantas acumuladas incinerándose.
Un tráiler que transportaba pollos vivos, fue incendiado por el grupo de sujetos, cientos de aves murieron calcinadas dentro de las jaulas.
En el primer cuadro de la Ciudad, profesores se organizaron y colocaron barricadas en las esquinas principales de acceso al campamento que mantienen desde el pasado 15 de mayo de este año, los negocios comenzaron a cerrar ante el temor de que los inconformes cometieran destrozos en el sitio,
QUEMAN ACCESOS A CIUDAD JUDICIAL. En el complejo de oficinas de Ciudad Judicial, un grupo de profesores y otros seguidores se plantaron alrededor de las 15:00 horas, por lo que fue necesaria una acción policiaca para liberar los accesos.
En las redes sociales se puso a la venta el producto de los saqueos a las tiendas departamentales como Coppel, Oxxo, Autozone, Aurrerá y otras. Los nuevos propietarios de los artículos presumían incluso haberlos obtenido en un robo.
En la región del Istmo, donde desde el domingo 12 fueron instaladas barricadas en carreteras de la zona, la Policía Federal montó un operativo para apagar fogatas y despejar la carretera, y escoltar 120 pipas en las cuales fueron trasladados combustibles de la Refinería Antonio Dovalí, de Salina Cruz, a gasolineras de la región.