Incognitapro

SERPIENTES Y ESCALERAS

 

 
  Decirlo es políticamente incorrecto, pero es verdad.

 

Delincuentes y derechos humanos

Desde hace años la defensa de los derechos ciudadanos se ha convertido en una lucha de grupos y organizaciones, es una bandera que enarbolan gobiernos y partidos y sirve a los políticos para enriquecer sus discursos. Defender los derechos de los demás no sólo es correcto, también suena y se ve bien, por eso prácticamente todos se asumen protectores de todos los derechos existentes y otros más que van saliendo en el camino. El problema es que en algunos casos esta lucha ha servido de salvoconducto para criminales.

La defensa de los derechos humanos y los derechos de los demás está bien. Punto. Salvaguardar valores universales e impulsar un país y un mundo más armónico y tolerante ha dado como resultado que sectores, grupos y personas que en otro momento eran maltratados o discriminados por sus pensamientos, creencias, sexualidad o preferencias tengan hoy un ambiente más amigable y justo.

Desde cualquier ángulo es loable el trabajo cotidiano que realizan diferentes organizaciones, sobre todo de orden civil, en defensa de los derechos de los demás, los valores universales y la equidad en todos los sentidos. Ha sido una batalla larga y muchas veces dolorosa que ha costado sacrificios y la vida de algunos luchadores sociales.

La pelea ha sido en muchos sentidos, ha ido en función del respeto a la identidad y pensamiento de las personas y también a la autonomía de instituciones clave en el desarrollo y formación de una mejor sociedad.

Pero en este largo camino de transformación y lucha colectiva a veces hay quienes equivocan el sentido de las cosas y otros que utilizan esta noble tarea para fines perversos. La lucha de los derechos humanos, por ejemplo, es una batalla histórica que se libra desde múltiples trincheras, se acompaña de acciones para proteger la integridad de las personas y en el caso de hechos delictivos, persigue que las acciones de las autoridades sean correctas, justas y respetando en todo momento al ser humano.

Aquí es donde en algún momento las cosas comienzan a perder sentido porque muchas veces el respeto a los derechos humanos se convierte en un camino utilizado por algunos personajes para buscar lagunas jurídicas y evitar que se haga justicia. Digámoslo con todas sus letras: hay abogados y jueces corruptos que arman su defensa en función de los derechos humanos y con ello logran la inmediata libertad de sus clientes, no importando que todas las pruebas estén en su contra.

También hay que destacar la complicidad o torpeza de algunos organismos defensores de derechos humanos que se prestan a este tipo de maniobras; la fórmula es simple y ha funcionado: ladrones, asesinos, violadores, secuestradores y narcotraficantes evaden de manera constante el brazo de la ley gracias a que los abogados arman su defensa en torno a una supuesta violación de los derechos humanos de los imputados, sin pensar en los derechos humanos de las víctimas.

¿Cuántas veces, lectora lector querido, has sabido de casos en los que los delincuentes salen libres porque el expediente en su contra se armó mal o al momento de ser detenidos, según los abogados, los policías no respetaron “el debido proceso y violentaron sus derechos humanos”? Recordemos, por poner un ejemplo reciente, el caso del “presunto” (la ley obliga llamarlo así hasta que sea sentenciado) asesino de dos líderes sindicales en el centro de Cuernavaca; o que tal la declaración de la Secretaria General de la UAEM en contra de los policías que detuvieron al “presunto” asesino de la joven Mariana “porque se violentó la autonomía universitaria” al hacerlo en el estacionamiento de la Prepa 1.

¿Qué opinan los familiares de las dos personas que perdieron la vida en el centro histórico de Cuernavaca a manos de Maximiliano “N”, de que las autoridades estén más preocupadas en el respeto de los derechos humanos del tirador, que en los derechos humanos de las víctimas? ¿Qué piensan todos aquellos que vivieron de cerca ese incidente, que tuvieron que salir corriendo para evadir las balas o resultaron heridos, de que por no cumplirse “el debido proceso” al momento de capturar a Maximiliano, el tirador pudiera quedar libre? ¿Qué opinan los familiares, compañeros y amigos de Mariana, de que la segunda al mando de la máxima casa de estudios de Morelos esté más preocupada por la “autonomía universitaria” que en resolver un feminicidio?

Insisto: la defensa de los derechos humanos, la tolerancia y los valores universales está bien y no debe parar nunca. El trabajo que han hecho miles de personas es loable desde cualquier ángulo y merece el respeto y reconocimiento colectivo. Lo que no es correcto es que se confunda o se utilicen los derechos humanos como un instrumento legal para liberar delincuentes o se manejen en un discurso demagogo para obtener aplausos.

El pensamiento es colectivo, aunque no se exprese en público, porque es “políticamente incorrecto”: la defensa de los derechos humanos se ha politizado y se pervierte, ciertos grupos y organizaciones desvirtúan el tema y olvidan que los derechos humanos de los delincuentes no deben estar por encima de los derechos humanos de sus víctimas. En castellano: ¿Por qué privilegiar los derechos humanos de secuestradores, asesinos, extorsionadores y ladrones, cuando ellos acabaron con los derechos humanos (y a veces la vida) de sus víctimas?

Sin dar un paso atrás en los logros obtenidos en materia de derechos universales, es momento de hacer una pausa en el camino para revisar cómo este tipo de valores son utilizados por algunos como mecanismo de impunidad.

Por supuesto que las autoridades tienen que actuar conforme a la ley y tienen que respetar los derechos de todas las personas (incluyendo a los detenidos), pero no es posible que se consideren más importantes los derechos de los delincuentes que los de sus víctimas y que por un tecnicismo jurídico los jueces concedan la libertad a quienes evidentemente son culpables.

Los derechos humanos son un valor universal innegociable, pero no deben ser usado como escudo de impunidad para proteger delincuentes.

Los derechos de los pillos no pueden ni deben estar por encima de los derechos de sus víctimas.

Decirlo es políticamente incorrecto, pero es cierto.

  • posdata

Hace unos días una joven de 22 años, estudiante universitaria y parte de un equipo deportivo de la UAEM desapareció y posteriormente fue hallada sin vida y desnuda, con señales de agresiones físicas y sexuales.

El caso cobró relevancia de inmediato, se trataba de un feminicidio más en una entidad donde las agresiones contra mujeres se ha convertido en un serio e imparable problema; el caso de Mariana no fue la excepción; quienes la conocieron la describen como una buena amiga, deportista, con muchas ilusiones en la vida.

Quizá porque la presión social en el tema fue mucha o tal vez por eficacia de las autoridades, el caso es que rápidamente la FGE identificó a los presuntos asesinos y obtuvo los elementos necesarios para ubicarlos y capturarlos; al primero de ellos lo detuvieron en el estacionamiento de la Preparatoria Número 1 de Cuernavaca.

Pero lo que debía ser una acción plausible de las autoridades, inmediatamente fue calificado por la rectoría de la UAEM como una “violación a la autonomía universitaria”. Para la secretaria general de la universidad de Morelos, Fabiola Álvarez Velasco, el proceder de los policías fue condenable porque se actuó dentro de las instalaciones universitarias, hubo fuerza excesiva y los elementos iban armados.

“Condenamos y reprochamos enérgicamente los hechos” dice en un comunicado la UAEM; exigen una investigación “rigurosa y eficiente” y precisan que la autonomía universitaria “no es un estado de excepción”. La UAEM es un espacio de reflexión crítica, donde se respeta, protege y garantiza la pluralidad de ideas y el pleno ejercicio de las libertades, concluye el boletín que firma Fabiola Álvarez Velasco.

Personalmente no entiendo la postura de la UAEM, ni me explico la actitud de una mujer que debería sentir empatía ante la detención del asesino de una jovencita. Me parece lamentable que la universidad de Morelos se preocupe más por su autonomía (¿En qué afecta su soberanía que se capture a un presunto asesino en uno de sus estacionamientos?), que por la integridad física de su comunidad. ¿Acaso prefieren que los asesinos continúen libres y se escondan en sus instalaciones?

Fabiola Álvarez condena la detención de un menor de edad (presunto asesino) en sus instalaciones (donde se movía en libertad), con uso excesivo de fuerza (lo cual nunca se ve en el video que circula en las redes sociales) y en un operativo en el que participaron elementos armados (¿Esperaba que los policías fueran con flores a detener a un feminicida?), pero tardó 15 días en pronunciarse por la muerte de una jovencita de 22 años que fue ultrajada y asesinada.

¿Merece una persona así ocupar la segunda posición en importancia de la Universidad de Morelos? ¿Comparte el rector Gustavo Urquiza la postura de la secretaria general de la UAEM?

Y el remate:

Al pronunciarse por la violación de la autonomía universitaria en la detención de los imputados, el rector de la UAEM, Gustavo Urquiza Beltrán, indicó que se ha brindado asesoría legal a las familias de los dos jóvenes (los presuntos asesinos). 

“Ellos han tenido el acompañamiento del abogado general de nuestra universidad, cuidando que no les violen sus derechos y estamos dando asesoría a los padres”

Los jóvenes, según informa la FGE, han aceptado que cometieron el asesinato y les encontraron las pertenencias de Mariana.

  • nota

Tomar casetas de cobro se ha vuelto cosa común en los nuevos tiempos. Tiro por viaje diversos grupos de personas llegan a las garitas y con la complacencia de las autoridades federales, abren las plumas para que los viajeros pasen, previo cobro de una “cooperación voluntaria”.

Ahora los manifestantes no se molestan en explicar las razones de su inconformidad, ni dicen a qué grupo representan, simplemente llegan, desplazan a los cobradores y empiezan a cobrar 50 pesos por auto. ¿Por qué se manifiestan? Pregunté hace algunos días a un jovencito que estaba dejando pasar a los automóviles en la caseta de Tlalpan; ¡Porque si! Fue su respuesta.

Hace un par de semanas leí un reportaje sobre este tema publicado en un periódico nacional; ahí el reportero narraba que estos grupos operaban en coordinación con el personal de Capufe, con quien dividían las ganancias que en un día podían superar los 4.5 millones de pesos.

Frente a quienes toman las casetas siempre está la Policía Federal; de lejos los observan y callan, no actúan porque Andrés Manuel López Obrador ha dicho que en su gobierno no habrá ley del garrote.

Es el huachicoleo carretero. Obvio: es culpa de la mafia del poder y de las administraciones pasadas.

¡Pinche Peña!

  • post it

1- Josefa González-Blanco Ortiz-Mena, titular de SEMARNAT renunció a su cargo por retrasar un vuelo: pidió a un funcionario de Aeromexico que la esperaran porque venía demorada; el avión tuvo que regresar a la plataforma y los pasajeros debieron aguardar 38 minutos hasta que la dama llegó.

"El día de ayer al iniciar una gira de trabajo, causé un retraso a los pasajeros que viajaban en el avión y su tripulación. No hay justificación. La verdadera transformación de México exige total congruencia con los valores de equidad y justicia. Nadie debe de tener privilegios y el beneficio de uno, así sea para cumplir con sus funciones”, dijo Josefa González-Blanco Ortiz Mena, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales al presentar su renuncia.

2- Fabiola Álvarez Velasco, secretaria General de la UAEM se enojó porque detuvieron a un estudiante (el presunto homicida) en el estacionamiento de la Prepa 1 y emitió un comunicado condenando los hechos; exigió respeto a la autonomía universitaria y explicación a la FGE por sus actos. Nada ha dicho sobre el asesinato de Mariana, la joven de 22 años a quien dos alumnos de la UAEM arrebataron la vida.

Personalmente me parece más grave la actuación de la secretaria general de la UAEM, que el yerro de la ex titular de Semarnat; la segunda renunció al cargo por congruencia, pero la primera evidentemente no conoce ese término.

  • redes sociales

¿Qué sustos nos deparan esta semana en Morelos?

Comentarios para una columna optimista:

elregional.com.mx

Twitter: @eolopacheco

FB: Eolopachecomx

Instagram: eolopachecomx

Ámbito: 
Local