Revés para Morena
El proyecto político de Jaime Bonilla en Baja California, así como el de Morena en la entidad y a nivel nacional sufrió un duro revés justo el último día de campañas rumbo a la gubernatura. Esto después de que la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación votara por unanimidad (sin que hubiese posicionamientos de por medio) revertir el fallo del Tribunal local que estableció un periodo de 6 años para la gubernatura en disputa, por lo que el periodo de candidato que gane la elección al frente de la administración de la entidad fronteriza será únicamente de dos años. Hay que recordar que Bonilla llegó a dudar si aceptaba o no la candidatura en estas condiciones, pues su intención era participar en los comicios de 2021 para que, en caso de resultar electo, tuviera un periodo completo de 6 años. Después de haber impugnado la reforma constitucional que estableció el periodo de dos años, aún quedaba la última aduana del Tribunal federal, la cual fue adversa.
‘Cocinan’ alianza en el PRI
La fotografía de la reunión de los gobernadores priistas (a excepción de Claudia Pavlovich) con el mandatario de Campeche y aspirante a la dirigencia nacional del PRI Alejandro Moreno ya tuvo una respuesta por parte de sus competidores. Tanto Ivonne Ortega Pacheco como Ulises Ruiz se reunieron con José Narro, y los tres condenaron lo que consideran una cargada en favor de ‘Alito’ a quien identifican como el candidato de la cúpula. Este acercamiento podría terminar con el anuncio de una fórmula entre Ivonne Ortega y José Narro, en la que aún estarían negociando quien iría como candidato a la presidencia y quien a la secretaría general. La pregunta es si Ulises Ruiz iría con esta alianza. Atentos.
Sigue quedando a deber
En el año 2017, Darío Flota Ocampo asumió la dirección del recién creado Consejo de Promoción Turística en Quintana Roo, y lo hizo en medio de cuestionamientos por su pasado en la administración de Roberto Borge como titular del Fideicomiso de Promoción Turística de la Riviera Maya, donde fue señalado por supuestas transacciones con dinero público a empresas fantasmas, entre otras irregularidades. En ese entonces, prometió que limpiaría su nombre de lo que llamó ‘infundios’ y que lo haría a través del trabajo y entregando resultados. Bueno, pues que alguien le avise al funcionario que dos años después, la gente de Quintana Roo continúa esperando.