El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, confirma el despliegue de 6.000 agentes de la recién creada Guardia Nacional en la frontera con Guatemala
La segunda reunión entre las delegaciones de México y Estados Unidos con el objetivo de evitar el peor de los escenarios para el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador —la imposición de un arancel general del 5% por parte de su mayor socio comercial— ha concluido este jueves sin acuerdo. Ambas partes, como ocurrió 24 horas antes, se han emplazado a seguir negociando este viernes. Las autoridades mexicanas negocian contrarreloj una salida a la amenaza de un gravamen si no frena la inmigración irregular. Sin embargo, y pese a que importantes figuras republicanas han dejado caer que el arancel puede no entrar en vigor, los dos encuentros celebrados hasta ahora entre el canciller Marcelo Ebrard y su homólogo estadounidense, Mike Pompeo, se han saldado sin fumata blanca. El titular mexicano de Exteriores ha confirmado que se reforzará la frontera con Guatemala con 6.000 agentes de la recién creada Guardia Nacional. Además, las autoridades mexicanas han anunciado el bloqueo de cuentas bancarias vinculadas a personas sospechosas de haber participado en el tráfico de personas. Ninguno de los dos compromisos parecen ser suficientes para Washington.
Como cierre a la retransmisión en vivo de este juves, una breve recopilación de lo sucedido este jueves, en la segunda jornada de reuniones entre las delegaciones estadounidense y mexicana en Washington:
- La amenaza del arancel sigue latente, aunque ambas partes acercan posturas. Este jueves, el Gobierno de López Obrador ha anunciado el despliegue de 6.000 agentes de la Guardia Nacional en la frontera sur y el bloqueo de cuentas bancarias de sospechosos de haber participado en actividades de tráfico de personas. Son guiños claros hacia Washington, aunque la primera potencia mundial sigue sin dar su brazo a torcer.
- La retórica de la Administración Trump mantiene su tono duro contra México, pero su predisposición a mantenerse un día más en la mesa de negociación parece augurar un final en el que EE UU logre un compromiso mayor de su vecino del sur en el capítulo migratorio y México evite un arancel que supondría un severo golpe para su economía, que depende en gran medida de las exportaciones a sus dos socios en el TLC, EE UU y, en menor medida, Canadá.
- El mercado cambiario, el mejor termómetro del discurrir de las negociaciones, ha vivido este jueves una jornada mucho más tranquila que en la víspera: a pesar de la degradación de la nota crediticia de la petrolera estatal (Pemex), el peso ha cerrado la sesión sin grandes pérdidas contra el dólar y el inicio de su cotización del viernes en el tramo asiático (un indicativo menos certero, dado el escaso volumen de negociación) ha sido al alza.
Hasta aquí nuestra retransmisión, minuto a minuto, de este jueves. Nuestro compañero Jon Martín Cullell estará con Uds. a primera hora de la mañana de mañana. Buenas noches y gracias por su atención.
Ignacio Fariza
Pese a los avances, reconocidos por ambas partes, la presión estadounidense sigue siendo fuerte: después de que Donald Trump dijese esta mañana que la amenaza arancelaria seguía en pie —"y lo digo en serio", remarcó en el tramo final de su gira europea—, la jefe de Comunicación de la Casa Blanca, Mercedes Schlapp, ha remarcado horas después que la situación se encamina "hacia los aranceles". "Lo que hemos visto hasta ahora simplemente no es suficiente", ha subrayado Schlapp en Fox News. Ese mensaje de intransigencia choca, sin embargo, con su disposición a seguir negociando, más aún cuando México ha empezado a abrir la mano con dos promesas concretas: enviar a 6.000 agentes de la Guardia Nacional a la frontera sur y bloquear las cuentas bancarias de aquellas personas sospechosas de haber participado en el tráfico de personas. La entrada en vigor del arancel sobre México golpearía severamente al país latinoamericano, sí, pero también tendría consecuencias en la orilla norte del río Bravo: ninguna de las dos partes puede permitirse que se llegue a esa situación.
Buena acogida en los mercados a la confirmación del canciller mexicano de que las reuniones entre ambos Gobiernos continuarán mañana. El peso gana algo más de una décima porcentual ahora mismo, borrando las pérdidas cosechadas en los minutos anteriores. En el gráfico de Bloomberg —que hay que leer a la inversa: son dólares por pesos y no pesos por dólares— se puede observar la curva de la moneda mexicana en el momento en el que Ebrard ha hecho público que EE UU y México seguirán en la mesa de diálogo.
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, anuncia que las conversaciones con EE UU seguirán este viernes y confirma que se desplegarán 6.000 agentes de la Guardia Nacional en la frontera sur, como había adelantado a media tarde The Washington Post. "Hemos informado al Gobierno de EE UU de que se formó en México la Guardia Nacional (...), que tiene la encomienda de cubrir las regiones, la coordinación de regiones que son frontera sur. Y les hemos explicado que son 6.000 hombres que van a estar ahí desplegados", ha dicho la mano derecha de López Obrador para asuntos exteriores.
¿Cuáles son los sectores que peor lo tendrían en caso de que se iniciase una guerra arancelaria entre EE UU y México? Los analistas lo tienen claro: el campo y la industria extractiva y de refino. Los primeros, porque en caso de contraréplica mexicana —que, como adelantó EL PAÍS, el Ejecutivo de López Obrador ya está estudiando Estado por Estado y condado por condado— tendría muy difícil colocar sus excedentes. La segunda, porque uno de los mayores compradores de gasolina estadounidense es México y porque sería mucho más caro comprar crudo al país latinoamericano, de donde procede el 10% del petróleo que importa EE UU. No debe despreciarse la fuerza de ninguno de ellos: obstante fueron dos de los actores en los que más se apoyó Trump en su camino a la Casa Blanca, en 2016.
Las expectativas de pacto siguen intactas del lado mexicano. "Tengo confianza en que se llegue a un acuerdo para que no se apliquen las medidas unilaterales [los aranceles] a partir del lunes próximo", ha dicho Andrés Manuel López Obrador esta mañana. "Esperemos que el día de hoy se logre un acuerdo". Horas después la situación está como sigue: parece difícil que se alcance un acuerdo que cierre definitivamente la posibilidad del gravamen sobre los productos mexicanos, pero sí está más cercano algún tipo de mensaje por parte de Washington en el sentido de retrasar la aplicación del primer arancel (del 5%) prevista para el próximo lunes.