En informe a un año de su triunfo electoral asegura que arrancará de raíz la corrupción a más tardar en diciembre; enumera logros en 85 minutos ante 100 mil personas; admite pendientes en salud, economía y ante violencia heredada

El Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que a siete meses de su gobierno la Cuarta Transformación es un proceso que no tiene retorno, y aclaró: “No luchamos para construir una dictadura, luchamos para construir una auténtica, una verdadera democracia”. 

Ante 100 mil asistentes reunidos en el Zócalo con motivo de su informe de actividades, dijo: “Este proceso no tiene paso atrás. Por eso nada de titubeos ni medias tintas; una cosa es actuar con prudencia y respeto a las libertades y otra cosa es la indefinición”.

Al hacer un balance, aseguró que “se han cumplido 78 de los 100 compromisos que hice en esta plaza” y prometió que a más tardar en diciembre “terminaremos de arrancar de raíz al régimen corrupto y este mismo año quedarán construidas las bases para la transformación política de México”. 

“Siempre en momentos de adversidad y ante la amenaza de poderes hegemónicos, vamos a actuar unidos”

Durante su discurso dijo sentirse optimista y destacó sus principales logros, como el combate a la corrupción, la reducción del robo de combustible en 94 por ciento, la tipificación de la corrupción y el fraude electoral como delitos graves, la desaparición del Estado Mayor Presidencial, la venta de flotillas de autos y aviones del gobierno y la reducción de salarios de la alta burocracia. 

En materia de desarrollo social, resaltó la entrega de pensiones y apoyo a personas con discapacidad, mientras que en el sector educativo presumió la entrega de becas en todos los niveles y la cancelación de la “mal llamada” Reforma Educativa del sexenio anterior. 

“En total recibirán becas 10 millones de estudiantes, lo que significará una inversión de 60 mil millones de pesos”, dijo. 

“Entre más rápido consumamos la obra de transformación, más tiempo tendremos para consolidarla (…) porque si regresara al poder el conservadurismo faccioso y corrupto, ni siquiera en esa circunstancia podrían nuestros adversarios dar marcha atrás a lo establecido”

Andrés Manuel López Obrador

Presidente de México

Respecto al empleo, expuso que, derivado del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, “están trabajando más de 600 mil jóvenes que antes eran discriminados y tratados como ninis (que ni estudian ni trabajan); en tres meses más llegaremos a un millón de jóvenes y a más tardar en 2021, ningún joven se quedará fuera del trabajo o del estudio”. 

En materia económica señaló que, “aunque poco, la economía está creciendo; no hay recesión y además es menos injusta la distribución del ingreso; es decir, hay más desarrollo y más bienestar”. 

Afirmó que “no ha crecido ni crecerá la deuda pública”; que la inflación ha bajado de 5.3 a 4.3 por ciento en comparación con el mismo periodo del año pasado y que en todo el país no ha habido aumentos en los energéticos. 

“No luchamos para construir una dictadura, sino para construir una auténtica democracia”

Al abordar el tema de la seguridad, López Obrador advirtió: “No se tolera la tortura ni ninguna otra violación a los derechos humanos”, y prometió que su gobierno no descansará hasta saber el paradero de los estudiantes de Ayotzinapa. 

Agregó que en esta administración “se terminó la guerra de exterminio contra la llamada delincuencia organizada”.

Otro tema fue la relación de México con Estados Unidos. “Hace unos días superamos una posible crisis económica y política mediante un acuerdo migratorio que nos obliga a ser más estrictos en la aplicación de la ley en la materia, sin violar los derechos humanos y rescatando a nuestro favor el reconocimiento de que se atenderá este asunto sin usar la fuerza, sino creando oportunidades de trabajo y bienestar para la gente en sus lugares de origen”, puntualizó. 

“A más tardar en diciembre terminaremos de arrancar de raíz al régimen corrupto… y quedarán construidas las bases para la transformación política de México”

Aseguró que “posiblemente nunca al comienzo de un gobierno se haya hecho tanto en tan poco tiempo”; sin embargo, reconoció que aún hay pendientes. 

“Falta mejorar el sistema de salud, falta mejorar la economía y todavía se mantienen los niveles de violencia que heredamos del antiguo régimen, aunque estoy seguro que muy pronto tendremos mejores resultados en estos retos y otras preocupaciones de nuestro pueblo”. 

Piden el día sin  goce de sueldo para acudir a informe

El primer informe del Presidente Andrés Manuel López Obrador congregó a alcaldes capitalinos, como Layda Sansores, de Álvaro Obregón, quien aseguró a La Razón que en cuanto fue la hora de la comida se dirigió a la Plaza de la Constitución.

Armando Quintero, de Iztacalco, llegó con un contingente de la demarcación. El funcionario solicitó el día, sin goce de sueldo, para acudir al acto.

Caso similar ocurrió con la alcaldesa de Tlalpan, Patricia Aceves, quien dijo a este medio que también pidió el día, para que no haya problemas administrativos por ausentarse unas horas de sus funciones públicas.

Sólo tres personajes estuvieron en el templete mientras el mandatario daba su discurso: su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, el presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo, y la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
Esta última, en una entrevista al término del informe, refirió que ha sido maravilloso lo alcanzado en los primeros siete meses de la gestión federal y declaró que los logros de la Presidencia “nos llaman a trabajar más fuerte”.

En opinión de Muñoz Ledo, el balance de los primeros meses de Gobierno es que se ha trabajado mucho, pero falta desmontar viejas estructuras; “la gente está acostumbrada a que vienen los del PAN, los del PRI; eso no es lo nuestro, es un cambio de país y eso no se entiende. Ojalá que con el tiempo así ocurra”.

Con información de Karla Mora