Los aspirantes a la Dirigencia Nacional y Secretaría General del PRI esperan que el TEPJF falle a favor de ellos para contender en las elecciones internas de agosto. Aseguran que su expulsión fue impulsada por Ivonne Ortega, candidata a dirigir al tricolor
La lucha al interior del Partido Revolucionario Institucional (PRI) por la próxima renovación de su Dirigencia Nacional sigue subiendo de tono.
A poco más de un mes para que la militancia del tricolor elija a su próximo dirigente y renueve su Secretaría General, la reciente cancelación de la candidatura de la fórmula conformada por Lorena Piñón Rivera y Daniel Santos Flores vuelve a generar dudas sobre la transparencia y legalidad en el proceso.
El pasado 26 de junio, la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del PRI instruyó la cancelación de la candidatura de Piñón Rivera a la Dirigencia Nacional, dejando en la contienda a Alejandro Moreno, gobernador con licencia de Campeche, y a Ivonne Ortega, exgobernadora de Yucatán.
Por otra parte, a Santos Flores, compañero de fórmula de Lorena Piñón, le fue retirada la candidatura a la Secretaría General.
El motivo de la eliminación de los contendientes, según la Comisión Nacional de Justicia Partidaria, fue que Piñón supuestamente fue postulada como candidata por el PAN a diputada local de Veracruz para el periodo 2015-2016.
En entrevista con Reporte Índigo, Lorena Piñón niega haber concursado por el PAN a un cargo público y confía en que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) restituya su candidatura al comprobar que ella no ha estado en las filas de Acción Nacional y pueda participar para la elección a la dirigencia priista el próximo 11 de agosto.
“Con muchas ganas arrancamos este proceso. Buscamos los consensos, nos reunimos con presidentes estatales de partido, estuvimos buscando las firmas con sectores y organizaciones, fuimos el segundo lugar y obtuvimos 11 firmas para poder inscribirnos en esta contienda”, señala.
Con respecto a su denuncia ante el TEPJF, Piñón confía en que resuelvan su caso y el de su compañero Daniel Santos, pues entre las pruebas que presentó en su denuncia por esta acción de la Comisión de Justicia del PRI, se encuentra una constancia de militancia tricolor por más de 17 años.
“Buscaron e inventaron una sarta de cosas; entre ellas dijeron que yo era candidata del PAN lo cual es una mentira. Y después de eso así nos descarrilaron, a la mala, con injusticia. Pero creo ciegamente en las instituciones de este país, creo que el TRIFE es imparcial y yo espero que pronto nos dé el fallo a favor, porque tenemos todas las pruebas”, agregó Piñón Rivera.
Ambos aspirantes coinciden en que en el PRI todavía no se han extirpado prácticas como la toma de decisiones en las cúpulas partidistas; aseguran representar a la militancia y, al no estar relacionados con alguno de estos grupos de poder, los hicieron a un lado.
También concuerdan que Ivonne Ortega es la única beneficiada de su salida del proceso electivo y por tanto la responsabilizan de esta acción.
“Si nosotros representáramos alguna cúpula no nos hubieran sacado. Algo que hemos platicado Lorena y yo es que siempre hemos sido claros, que al PRI le pasa como al que tiene mal aliento, él no se da cuenta, pero todo el mundo sí; y es el que tiene el problema de cúpulas y dedazos.
“En este afán de querer mantenerse en acuerdos cupulares, a nosotros dos nos sacan. La única beneficiada de que no estemos aquí es Ivonne Ortega y son simples matemáticas, es la única mujer que quería estar en la contienda”, comenta Daniel Santos.