Lo releva subsecretario con perfil técnico; en carta de renuncia, el hasta ayer titular de Hacienda cuestiona determinaciones económicas del Gobierno y se queja de imposición de funcionarios sin expertos promovida por influyentes; el presidente lo atribuye a “titubeos” en su equipo; nombra a Arturo Herrera; políticos e IP exigen aclarar influyentismo; piden rigor técnico en ejecución de políticas públicas
En una carta que difundió ayer en redes sociales a las 11:15 horas, Carlos Urzúa renunció a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), convirtiéndose en el segundo secretario de Estado que dimite a la Cuarta Transformación, pero además lo hizo con una denuncia en tres vías.
En su escrito, acusa que en el Gobierno federal se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento, que le han impuesto funcionarios sin conocimiento de la Hacienda Pública y que éstos se han hecho por personajes influyentes con un patente conflicto de interés.
Su decisión provocó gran revuelo en los sectores político y económico y también una reacción del Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien apenas una hora después, vía Facebook live, anunció el nombre del relevo, Arturo Herrera Gutiérrez, pero también le envió un mensaje al funcionario saliente.
“Como se están llevando a cabo estos cambios, se cimbra, rechina y hay, a veces, la incomprensión o dudas, titubeos, incluso al interior del mismo gobierno, del mismo equipo, pero nosotros tenemos que actuar con decisión y con aplomo”, señaló en el video, grabado en el despacho presidencial de Palacio Nacional.
Ocupante hasta ayer de la oficina ubicada en el costado norte de Palacio —la de AMLO está en el extremo sur— Urzúa hizo el inesperado anuncio de su salida con un agradecimiento por la posibilidad de servir a México que precedió la expresión de sus inconformidades.
Afirmó que tuvo muchas discrepancias en materia económica, derivadas de que en la presente administración se “tomaron decisiones de política pública sin el suficiente sustento”.
También señaló sentirse convencido de que “toda la política económica debe realizarse con base a la evidencia, cuidando los diversos efectos que ésta pueda tener y libre de todo extremismo, sea éste de derecha o de izquierda”. Aunque tales convicciones, dijo, no encontraron eco.
Enseguida, expresó una queja, en la que cuestionó la falta de preparación de funcionarios en materia hacendaria, seguida de un cuestionamiento sobre presuntos conflictos de interés.
“Me resultó inaceptable la imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública. Esto fue motivado por personajes influyentes del actual gobierno con un patente conflicto de interés”, precisó; sin embargo, el funcionario no mencionó nombre alguno.
López Obrador reaccionó con un video publicado a las 12:15 horas en el que afirmó que aceptó la renuncia de Urzúa, quien directamente lo enteró de ello en una reunión sostenida ahí mismo en Palacio Nacional, y le agradeció por haber sido parte de su equipo.
El Presidente insistió que la nueva administración tiene el mandato de cambiar la política económica que se ha impuesto desde hace 36 años; incluso cuando las partes no entiendan la necesidad de dicha transformación.
“A veces no se entiende que no podemos seguir con las mismas estrategias, no se puede poner vino nuevo en botellas viejas. Es cambio de verdad, transformación, no simulación, se debe acabar con la corrupción, con la impunidad. Se tiene que hacer valer la austeridad republicana”, precisó.
El primer mandatario también prometió: “Vamos a continuar haciendo las cosas bien, como vamos hasta ahora, y hacia adelante; que tengamos más crecimiento económico para que haya más empleos y haya más bienestar”.
La economía debe estar siempre al servicio del pueblo y de la gente humilde, para así generar riqueza y distribuirla, dijo.
En el video, en el que anunció la designación de Arturo Herrera, quien lo acompaña —con un gesto adusto que más tarde sería motivo de múltiples memes—, López Obrador apuntó que “no se trata de crecer por crecer, sino de que haya más crecimiento y bienestar. Que haya desarrollo y no sólo crecimiento, y Arturo Herrera es el que va a hacerse cargo de la Secretaría de Hacienda”.
También dio un panorama de cómo se encuentra la economía, pese a la reacción negativa de los mercados financieros, presentada luego de la noticia, dijo que ubo calma. De acuerdo con el mandatario, “tenemos buenas cuentas, ha aumentado la recaudación, no tenemos déficit y no ha crecido la deuda pública”.