Vivo en un país que no es el mismo país donde vive Jaime Bonilla.

En el país de Bonilla los resultados de las elecciones tienen diferentes consecuencias a las que se tienen en el país donde yo vivo. 

El gobernador electo de Baja California lo dejó claro en una entrevista con Pepe Cárdenas la semana pasada.

Arranca diciéndole a Pepe que él está en lo de la entrega recepción, que apenas y ha volteado a ver el otro “asunto” —el de la extensión de su mandato a cinco años—. Que él no se ha negado a opinar, que él puede opinar, pero que es una situación del Congreso estatal donde Morena solo tiene dos diputados, que si opina o no opina no quiere decir que lo apruebe o no lo apruebe; que esta es una “gestión” que inició hace un año…

Y de repente:

“La elección de Baja California, Pepe, fue un mandato, no fue una elección normal. El pueblo de Baja California dijo aquí tienes los 17 distritos, aquí tienes las cinco alcaldías y la gubernatura. Hagan lo que tengan que hacer para cambiar este estado que está tronado, quebrado y con un índice altísimo de inseguridad. La gente está cansada y los diputados, por su propia decisión, consideraron que era una aberración hacerlo por dos años. Yo entro el primero de noviembre y en julio del año que entra empieza el proceso electoral, y gastarnos 800 millones de pesos, entonces ellos dijeron: ‘Esta gubernatura no va a ser de un año’… Y reaccionaron al resultado de la elección.”

Los votantes del país en el que vive Bonilla dieron un mandato, pero no están muy informados. Así lo explicó el próximo gobernador: “En la boleta no decía Jaime Bonilla para dos años… ni modo que digan voto para dos y no para cinco… la gente ni siquiera sabía… El PAN destrozó mi estado y la gente pide un cambio y votó a Jaime Bonilla, no a Jaime Bonilla por dos años”.

Cuando Pepe le enumeró el alud de críticas, Bonilla respondió: “Todas esas gentes que opinan son gente fuera del estado, no viven aquí… En Baja California se vive diferente. Arremetió contra Cuauhtémoc Cárdenas: “Aquí no tiene resonancia”, dijo, “y no defendió sus triunfos electorales”.

Eso sí, prometió que si le dan los cinco años “vamos a borrar a esos partidos (PRI y PAN)”.

Así el país en el que vive Jaime Bonilla. Allá se vive diferente.