Evalúa demandas por “acto de terrorismo” en El Paso, Texas; confirman siete connacionales muertos y siete heridos
Ciudad de México/Huetamo, Michoacán.— El canciller Marcelo Ebrard Casaubon afirmó que para México el tiroteo en El Paso, Texas, en el que murieron siete mexicanos y siete más resultaron heridos, es considerado un acto de terrorismo contra la comunidad mexicoamericana y de los mexicanos en Estados Unidos, por lo que tomarán medidas legales.
En un mensaje a medios, Ebrard Casaubon, quien hoy viaja a El Paso, dijo que entregará a la Fiscalía General de la República (FGR) la información necesaria para que evalúe iniciar una demanda por terrorismo contra los connacionales en Estados Unidos. De prosperar, añadió, sería la primera de esa naturaleza.
La intención, continuó, es que México tenga acceso a toda la información que surja sobre el tiroteo del sábado en el Walmart cercano al centro comercial Cielo Vista, en el que perdieron la vida 20 personas y 26 resultaron lesionadas. También se busca valorar si hay otros individuos implicados o potencialmente involucrados que pongan en riesgo la vida de mexicanos en el país vecino.
“Se promoverán acciones legales contra quien resulte responsable de la venta del arma de asalto o la persona [a la] que se le puede atribuir esta responsabilidad, y a quien directamente disparó. Vamos a pedir acceso a la investigación para saber cómo se vendió y cómo llegó esta arma a sus manos”, y si las autoridades estadounidenses tenían conocimiento de la peligrosidad del agresor, identificado como Patrick Crusius”.
Ebrard Casaubon sostuvo que en su caso, junto con la fiscalía mexicana, se valorará si existen los elementos necesarios para la extradición del autor o los autores de este hecho. “Para México este individuo es un terrorista”, externó.
Anunció que hoy se entregará una nota diplomática a Estados Unidos para que fije una “posición clara y contundente contra los crímenes de odio”; asimismo, a la brevedad se iniciarán reuniones con los cónsules generales de Texas, California, Chicago, Nueva York y Atlanta, para implementar medidas de protección a mexicanos.
Indicó que buscarán un encuentro con los países de habla hispana con paisanos en Estados Unidos para promover la defensa de los derechos y la cultura.
“México está indignado, pero no proponemos el odio contra el odio, actuaremos con la razón y apego a la ley. Entendemos que el pueblo de Estados Unidos también está de luto y nosotros aspiramos que lo que hemos vivido este fin de semana nunca más se repita”.
El canciller aseveró que el tema de las armas es “crucial”, por lo que en breve se tomarán más acciones legales correspondientes en materia de armas, y añadió que la dependencia a su cargo está en contacto con las familias afectadas a través del consulado, a fin de acompañarlas y representarles en el proceso de investigación en EU y el juicio.
Luego de la conferencia vespertina, el canciller elevó a siete el número de fallecidos mexicanos.
Más temprano, en Huetamo, Michoacán, el presidente Andrés Manuel López Obrador había cifrado en seis los mexicanos que perecieron en el tiroteo y confirmó que hay siete connacionales heridos. El Jefe de Estado instruyó al canciller Ebrard Casaubon a que a pesar del dolor y la indignación se actúen con mucha responsabilidad ante el gobierno estadounidense: “En EU hay elecciones, están en campaña y hay un proceso electoral, y nosotros no queremos inmiscuirnos en asuntos internos de otros países. Vamos a seguir manteniendo los principios de no intervención y autodeterminación de los pueblos”, aseveró.
El Jefe del Ejecutivo federal acotó que ya se avisó a los familiares de los mexicanos que perdieron la vida y se les pidió a los gobernadores de donde son originarias las víctimas, que se les ayude en todo en estos momentos difíciles.
López Obrador destacó que esos hechos reafirman la convicción de su gestión de que no deben de enfrentarse los problemas sociales con el uso de la fuerza y con la incitación al odio, sino buscar resolverlos con “la fraternidad universal”. “Nada por la fuerza, nada con la violencia. Tenemos que serenar a los países, al mundo, con la justicia”, insistió.
Convocó a dejar de usar de armas de fuego, armas destructivas, y abogó, en vez de eso, por “amarnos, querernos unos con otros, no odiarnos, hacer a un lado la discordia, buscar siempre la unidad de todos los seres humanos. Abrazos, no balazos. Esa es nuestra postura”.
“En México hay control sobre el manejo de armas”. Ya en Tuxpan, Michoacán, López Obrador confirmó que hay siete mexicanos fallecidos y pidió que “se castigue a los responsables y que las autoridades asuman también la responsabilidad en el caso de que se estén permitiendeo excesos como, por ejemplo, el uso indiscriminado de las armas porque eso no está bien”. Agregó que “no somos nadie para recomendar lo que tienen que hacer otros gobiernos, pero en México hay control sobre el manejo de las armas. En otros países es como comprar cualquier mercanía, no hay control y eso afecta mucho, todabía es tiempo de rectificar, de cambiar esas normas”.