La jugada de Trump con México
Desde los ojos de la diplomacia se vio que la Casa Blanca hizo una apuesta para que México no lograra frenar los flujos migratorios en la frontera sur, para obligar al gobierno federal a aceptar la exigencia de convertirse en un tercer país seguro. Sin embargo, nos comentan, la parte mexicana presumió una baja de 56 por ciento y la gráfica fue presentada por el canciller Marcelo Ebrard al vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence. La delegación mexicana, nos dicen, percibió un ambiente muy distinto al de hace tres meses, cuando Donald Trump puso en la mesa la amenaza de aplicación de aranceles escalonados. Don Mike, nos mencionan, dio una buena palmada, políticamente hablando, a Ebrard y a la embajadora mexicana en Washington, Martha Bárcena, cuando dijo en el salón Roosevelt de la Casa Blanca que hoy estamos en el mejor momento de la relación bilateral. Así que la jugada de Trump cambió de rumbo. ¿Por cuánto tiempo?
El lado B de la migración
Pero en el tema de la migración también hay un lado B, uno que está lejano de los acuerdos entre las máximas autoridades de México y Estados Unidos. Nos referimos al trato humanitario a los migrantes que llegan a México, que en los hechos no es tan humanitario en todos los casos. Nos comentan que el 6 de agosto pasado, en la Estación Migratoria Siglo XXI, murió el haitiano Maxene André, aparentemente por enfermedad. Sin embargo, es la hora en que el cuerpo no es repatriado a su país y entregado a su familia y nadie dice por qué.
Alcocer: no me ayudes compadre Novelo
Con mucha atención leyeron en una relevante oficina de Palacio Nacional el estudio sobre la reputación mediática de los secretarios de Estado, que ayer publicó EL UNIVERSAL. Nos aseguran que no hay sorpresas sobre los que están arriba, y tampoco sobre los que están abajo. Sin embargo, en el caso del secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela, quien en agosto tuvo la peor reputación mediática, aseguran que es un trabajo compartido. Si bien su declaración minimizando la gravedad de la falta de tratamientos para niños con cáncer influyó en su mala imagen, nos dicen que para generar información negativa a esa dependencia ayuda mucho el titular de la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), José Alonso Novelo Baeza. Aseguran que don José está enfrentado con una buena parte de la industria, con pacientes, organizaciones sociales y hasta con los agricultores. Y con otro piquito de mala imagen también le ayuda el subsecretario Hugo López Gatell, quien en plena crisis informativa deja plantados a los medios de comunicación. Un verdadero trabajo en equipo, afirman.
La guerra de la grasa y el azúcar
Esta semana será crucial en la Cámara de Diputados y el Senado de la República, pues uno de los primeros dictámenes que buscarán avalar será el del nuevo etiquetado de alimentos y bebidas altos en grasa y azúcares. Nos dicen que la expectativa sobre esta legislación es mucha. Por un lado, el Sistema Nacional de Protección Integral a Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), el sector que más sufre con el consumo de alimentos empacados espera que se apruebe sin ninguna restricción la obligación de que se coloquen leyendas en la etiqueta de los productos que los identifiquen como “alto en azúcares” y “alto en calorías”. El secretario ejecutivo del sistema, Ricardo Bucio Mujica, ha dicho que no aprobar el nuevo etiquetado “afectaría la vida de millones de niños”. Y por el otro lado, están los fabricantes de estos productos quienes también esperan una legislación menos dura, y vale la pena recordar que en la Cámara de Diputados ya hubo algunas trabas, pues los cabilderos lograron atrasar su dictamen unos días en la Comisión de Salud. ¿Quién ganará la guerra de la grasa y el azúcar?