Como el alacrán, está en su naturaleza
Son un engranaje de sí mismos.
Florestán
Yo no sé en qué momento alguien dijo al presidente Andrés Manuel López Obrador que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) era confiable, porque su estrategia histórica ha sido la de manifestación-bloqueo-arreglo-manifestación-bloqueo-arreglo y así hasta el infinito, bueno, así hasta estos días en los que mientras sus dirigentes se sentaban con él en Palacio Nacional y salían acuerdos, en San Lázaro Morena tenía todo paralizado, con el apoyo de esa organización.
Desde un principio, la CNTE dijo que las leyes reglamentarias de la reforma educativa no pasarían y no pasaron, a pesar del optimismo en la Secretaría de Educación Pública que organizó decenas de reuniones que ahora vemos infructuosas.
El plantón de la CNTE a la Cámara de Diputados, martes y miércoles, se convirtió ayer en bloqueo y sitio. A partir de las 9 de la mañana nadie entraba, nadie salía. La presidenta de la Mesa Directiva, Laura Rojas (PAN), suspendió la sesión, como el martes, y citó para el miércoles 18.
El punto es que ahora no fue Morena, que no las quería aprobar, sino la CNTE, que no los dejó entrar para reventar una sesión del pleno en la que ni iban a tocar el tema, pues las iniciativas ni siquiera se han dictaminado en comisiones.
Lo que no acabo de entender es cómo el Presidente de la República logra acuerdos con las dirigencias de esa organización en Palacio Nacional y al mismo tiempo sus bases sitian el otro palacio, el de San Lázaro, retienen a los diputados y trabajadores, revientan la sesión e impiden que se legislen esas leyes secundarias.
Solo lo entendería porque desde el principio la CNTE había dicho que esas leyes no pasarían y no pasaron. ¿Cómo lo lograron? Con su modus operandi de siempre: manifestación-bloqueo-arreglo-manifestación-bloqueo-arreglo.
Y en eso estamos todos atrapados.
RETALES
1. SORDOS. Como en otras ocasiones que la CNTE ha bloqueado San Lázaro, la presidenta en turno pidió el apoyo capitalino y federal para garantizar el derecho a sesionar, y como en otras ocasiones, con el PRI y con el PAN, esas autoridades miraron para otro lado;
2. FUERA. Ayer fue la Comisión de Igualdad de Género del Senado la que pidió al Presidente de la República que cese a José Manuel Mireles como subdelegado del Issste en Michoacán, tras los insultos a las mujeres, a las que llamó pirujas y nalguitas. El mantenerlo en el cargo es ya un desgaste para López Obrador, que ya sé que no acepta presiones, y hace bien, pero este caso es insostenible; y
3. GRITO. Como le adelanté, Olga Sánchez Cordero llevará la representación presidencial a la ceremonia de El Grito en Dolores Hidalgo, Guanajuato, la noche del 15. Lo que no sé es si el gobierno federal haya autorizado el presupuesto de esa fiesta, poco más de un millón de pesos, que canceló.
Nos vemos el martes, pero en privado