Otra vez los damnificados del sismo del 19 septiembre del 2017 fueron objeto de supuestos actos delictivos
La salida de los recursos fue del Fondo Unidos por Morelos, reveló el asesor Anticorrupción del Gobierno
En el régimen de Graco Ramírez Garrido se falsificaron firmas de damnificados del sismo del 19 septiembre del 2017, a través de las cuales, se operó la salida de recursos del Fondo Unidos por Morelos, reveló el asesor Anticorrupción del Gobierno local, Gerardo Becerra Chávez de Hita.
En entrevista, sostuvo que lo anterior forma parte del esquema de investigación; es un presunto desvió de recursos; empero, aclaró que se está indagando, aunque confirmó que existen 40 casos de afectados, en su mayoría del municipio de Jojutla, que supuestamente recibieron los recursos: “pero no fue así”.
“Hay gente que viene a reclamar ayuda que se les dio, y nosotros tenemos que ya se les entregó; pero, todo parece indicar que las firmas son falsas y tenemos que ir al fondo de toda investigación y, en este momento, lo digo con certeza, todavía no tenemos el dato exacto", acotó.
Aun cuando no existen pruebas de que el gobierno de Graco Ramírez haya utilizado la devastación para desviar recursos del Fondo, aseguró que dejaron “un desorden; (un) rompecabezas; muchas de las piezas aún no las encontramos”.
Los excoordinadores técnico y operativo de Unidos (Alexis Ayala Gutiérrez y Sergio Beltrán Toto) podrían estar implicados en la falsificación de las firmas; no obstante, puntualizó que se investiga.
Explicó que en la falsificación de rúbricas se dio en apoyos por cantidades que oscilaron entre 60 y 120 mil pesos: “… todo parece indicar que las firmas que están en los recibos no son de las personas a las que debieron llegar los recurso; son muchos casos”.
De igual forma, dijo que continúan las pesquisas sobre el destino de los recursos del Fondo; pero, por la falta de información y las irregularidades encontradas, los resultados de la auditoría estarán listas hasta el próximo mes de diciembre.
Además, Becerra Chávez confirmó que se presume un desvío de recursos por 200 millones de pesos, que estaban etiquetados para el Fideicomiso Ejecutivo del Fondo de Competitividad y Promoción del Empleo (Fidecomp), y supuestamente, se redireccionaron para la reconstrucción de viviendas dañadas por el terremoto que se suscitó en 2017; empero, no existe claridad sobre el destino del dinero.