Al encéfalo de la Suprema Corte
Pese a lo convincente de su argumentación (a mediados de año) contra los señalamientos periodísticos de que transfirió al extranjero una fortuna inexplicable, Eduardo Medina Mora decidió ayer dimitir de su ministerio en la Suprema Corte de Justicia, colocándose de manera tácita entre probables responsables de conductas indebidas y, peor, vulnerando la imagen de México porque desata la sospecha de falta de probidad entre los integrantes del pleno del máximo tribunal constitucional y principal contrapeso del Poder Ejecutivo.
Aunque en estricto derecho deba prevalecer la presunción de inocencia, su renuncia (11 años antes de concluir el honroso encargo) da pie a que desde ayer mismo, sin mediar el proceso legal de rigor, se le juzgue culpable.
El golpe a la Corte desconcierta porque apenas en junio escribió que el Poder Judicial “es la mejor institución de la República”.
Abogado, Medina Mora tiene 62 años, los 20 recientes encabezando áreas clave del Estado mexicano: el Centro de Investigación y Seguridad Nacional, la Secretaría federal de Seguridad Pública, la Procuraduría General de la República y las embajadas ante los gobiernos de Reino Unido y Estados Unidos.
Con una filtración, la Unidad de Inteligencia Financiera destiló que el ministro había hecho depósitos bancarios por 103 millones de pesos en un lapso en que sus ingresos equivalieron a la cuarta parte.
Al comentar el chisme, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el gobierno estadunidense notificó a la UIF movimientos “irregulares” de cuentas del ministro, “pero eso no significa que sea culpable, son indicios", indicó.
El titular de esa dependencia, Santiago Nieto, aseguró a su vez tener también información del Reino Unido, lo cual motivó una “investigación robusta” solicitada “por el Senado”. Pero en un tuit dejó entrever que ya iba sobre Medina Mora: “Se actuará conforme a derecho. Mi reconocimiento perenne al Poder Judicial de la Federación. Los hechos de una persona no trascienden a la institución…".
Según la especie, el ministro realizó transferencias superiores a sus ingresos por 903 mil pesos y dos millones 300 mil libras esterlinas a cuentas de HSBC en México y Reino Unido, así como dos millones 100 mil dólares al mismo banco en Estados Unidos.
Medina Mora desconoció como propias tales operaciones y escribió que los montos eran “completamente ajenos a mi realidad económica". Que las 32 transferencias sumaban casi siete millones y medio de pesos acordes a su ingreso en el Poder Judicial; que 12 de ellas, expresadas en dólares y libras esterlinas, “faltan a la verdad”. Las otras 20, afirmó, no se hicieron mediante múltiples cuentas en HSBC sino a través de una sola. finalmente, que los presuntos números de cuenta corresponden en realidad a clabes bancarias, y que lo que quiere interpretarse por 103 solo suma siete millones 487 mil 261 pesos.
De ser así, ¿qué lo empujó a renunciar?