Puentes o muros
El Tratado de Libre Comercio es la herramienta que tienen los países de América del Norte para hacer frente al desafío de regiones económicas poderosas que disputan la supremacía del comercio mundial.
México lleva a la Octava Cumbre del TLC, que se celebra hoy en Canadá, la oferta de ser un país en plena transformación institucional, con mejores oportunidades para la inversión.
El virus proteccionista que inoculó Donald Trump a la campaña presidencial de Estados Unidos puede descarrilar años de libre comercio en la región.
Por eso la reunión de hoy de Peña Nieto, Obama y Trudeau reviste una importancia singular. El dilema para el futuro inmediato es: tender puentes al comercio o edificar muros.
Evitar triunfalismos
El nuevo sistema penal constituye el cambio más importante en la impartición de justicia en el país en un siglo.
Supone cambios de fondo para hacer realidad el anhelo compartido de justicia expedita. Está en su etapa inicial.
Jueces y magistrados apenas se capacitan para instrumentar las nuevas reglas del juego.
De manera que incurrir en falsos triunfalismos puede contagiar al nuevo sistema de los vicios y defectos del anterior.
La alerta la planteó el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Luis María Aguilar, quien estableció que apenas hemos comenzado a revertir la inercia de décadas. No se vale engañar a nadie.
¿Y la tarjeta amarilla?
Los actos anticipados de campaña constituyen un delito electoral. El domingo pasado Morena emprendió en las calles de la ciudad la campaña presidencial de López Obrador a dos años de la jornada electoral.
La autoridad electoral tiene la obligación de pronunciarse.
Se trata de llamados para votar a favor o en contra de alguien antes de los tiempos formales de campaña.
El tabasqueño fue mucho más lejos: exigió renuncias en masa y precipitar el cambio de gobierno.
Si el INE no saca la tarjeta amarilla a Morena, todos los partidos saldrán a la calle para no dejar el campo libre al Peje y la campaña 2018 será un desastre.
Cumplir la ley
El diálogo es una tarea cotidiana de los políticos. La agenda nacional es abultada. El intercambio de opiniones es la vía para encontrar soluciones y salir adelante.
Dialogar no equivale a negociar la ley.
Es importante tenerlo presente con relación a los encuentros entre dirigentes de la CNTE y funcionarios de la Secretaría de Gobernación.
Entrevistado ayer en Quebec, el presidente Enrique Peña volvió sobre el tema: el gobierno no está dispuesto a negociar la ley.
De hecho los funcionarios públicos tienen que cumplir y hacer cumplir la ley. A eso se comprometieron.
Si se buscan cambios a la ley hay que emprender el proceso, que suele ser sinuoso, en el Poder Legislativo, que para eso está.