El reto de Piedra Ibarra
Muy tensa y accidentada, entre gritos y jaloneos, fue la toma de posesión de Rosario Piedra como nueva presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, en el Senado. Los reclamos de fraude por parte del PAN, bancada que ayer sumó el respaldo de sus gobernadores, las cartas de colectivos, los procesos jurídicos que encausaron otros aspirantes y los que se pueden abrir tras los hechos de ayer, generan un entorno de cuestionamiento que, incluso personas afines a Morena, señalan como inmerecido para la activista. Se dice que ahora Piedra Ibarra, quien estará al frente de la CNDH durante los próximos cinco años, tendrá el gran reto de legitimar su actuación, pero bajo la lupa.
• PRI y la tercera vía que naufragó
Y hablando de la elección del presidente de la CNDH, una de las posiciones que no se conoció, porque la discusión se enfrascó entre Morena y PAN, fue la del PRI, que, a través de la senadora Claudia Ruiz Massieu, proponía votar nuevamente la terna elegida. Es decir, no que se repusiera la ya realizada, dado que a su juicio, en ésta no se obtuvieron las dos terceras partes de los votos de los senadores presentes que marca la ley. Por eso, el sentido del voto tricolor fue en contra de la moción presentada por Ricardo Monreal, quien planteaba repetir la votación cuestionada. Al final ya se vio lo que pasó.
• Prueba en el AICM
La protesta que realizaron ayer, frente al AICM, policías federales rebeldes que no aceptan pasar a la Guardia Nacional y exigen una indemnización escaló en niveles de violencia. Sobre todo porque, además de lanzar gas lacrimógeno, los inconformes retuvieron a policías capitalinos. El secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch, intervino para liberar a los uniformados y dirigió las operaciones in situ para impedir el bloqueo de vialidades. Tuvo que emplear a fondo a la corporación para contener a los rebeldes y evitar que las afectaciones a terceros fueran mayores. Al final cumplió el objetivo de aplicar el Protocolo de Actuación Policial en el contexto de manifestaciones o reuniones, por instrucción de la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
• Coraje ganadero
Los que andan más que molestos son los legisladores ganaderos. Y es que resulta que el sector trae un recorte presupuestal de 80 por ciento, según lo hizo ver el diputado Eduardo Ron, quien asumió el liderazgo de las organizaciones que se verán afectadas por el ajuste, para emprender la lucha por lograr un mayor gasto en 2020. “No nos vamos a rajar”, advirtió el legislador y presidente de la Comisión de Ganadería de la Cámara de Diputados, quien lanzó un mensaje a “ya saben quién” de que “los ganaderos también son mexicanos”. Por lo pronto, decenas de organizaciones que también demandan ajustes presupuestales rodean San Lázaro. Y la mayoría son, como ocurrió el año pasado, por el tema del campo.
• Misión cumplida de la FAM
Y nuevamente fueron integrantes de las Fuerzas Armadas, que comanda el general Luis Crescencio Sandoval, quienes en la misión de traer al expresidente Evo Morales se lucieron y llevaron a cabo una tarea que el canciller Marcelo Ebrard calificó como “fuera de serie”. Se trata del piloto y la tripulación del avión que tuvo que librar las más diversas vicisitudes para regresar a territorio mexicano con el exmandatario boliviano sano, y salvo a bordo. Fueron casi 24 horas de vuelo sin descanso las que pasaron el general Miguel Eduardo Hernández, el teniente coronel Felipe Jarquín Hernández, y el capitán Julio César Sánchez Ruperto. Honores para la FAM.
• La senadora y los medios
A algunos legisladores ya se les está haciendo fácil tratar de desacreditar a reporteros y a medios de comunicación. Así pasó ayer con la senadora Martha Guerrero, secretaria de la Mesa Directiva del Senado, quien molesta, aparentemente, por la forma en que se cubrió la votación para elegir presidente de la CNDH, ayer les pidió jugar un papel de pluralidad y objetividad. Y hasta ahí podría ser comprensible su señalamiento; pero después lamentó que algunos medios “jueguen un papel inclinado hacia con quien están bien y hacia con quien muchas veces hasta dinero les dan”. El punto aquí, comentaron reporteros en el Senado, es que si a algunas personas con poder les resulta incómodo el trabajo de la prensa, algo está haciendo bien esa prensa.