Francisco Sansores manifestó que no hay una relación genética que hable de grupos humanos puros
En México y en gran parte del mundo, el concepto de raza, desde un punto de vista antropológico, “ya no es válido”; hace referencia “a una relación consanguínea”, y sería usado con términos políticos, para segregar “en función del poder”.
La “raza”, habla de “una sangre pura, no mezclada” cuando las culturas de todos los tiempos se han formado precisamente por la mezcla de dicha sangre, advierten especialistas de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), de la Universidad Nacional Autónoma de México,
Separar a la población en términos de raza, “es más bien un concepto de corte ideológico, utilizado, —en todos los tiempos— como herramienta política”, para dividir, puntualiza el antropólogo y sociólogo, Francisco Javier Sansores González.
Agregó que el concepto de raza “ha sido ideológicamente manejado por grupos en el poder”, tanto de izquierda como de derecha, pero “no hay una relación genética que hable de grupos humanos puros”.
Concepto caduco
En América, “la antropología dejó atrás este concepto, porque incluso desde el paso por el Estrecho de Bering, la mezcla entre grupos orientales ya existía, por lo que no hay una relación de pureza”.
Incluso, desde los primeros hombres, que aparecen en Old Dubái, en África del Este, ya existe mezcla entre distintos grupos.
De ahí que, en nuestro país, en la época actual, el determinar quién es indígena 100% puro, o mestizo, no aplicaría “en términos de sangre, o de raza”.
El pasado 17 de noviembre, de gira por Nayarit, durante su encuentro con las comunidades Cira, Wixarica, Mexicanero y Tepehuano del sur del estado de Nayarit, el presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que se beneficiaría con Pensión Universal a los adultos mayores “indígenas”, a partir de los 65 años de edad, y a los “mestizos” al cumplir los 68, lo que desató la polémica en redes sociales.
Al día siguiente, en Palacio Nacional, durante su conferencia matutina, el mandatario afirmó que “si el darle preferencia a los indígenas, es racista, que me apunten en la lista”.
No se trata de “si se es racista o no. El punto es que es político su uso”, enfatizó el también excolaborador del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Los términos “indígena” y “mestizo”, usados de esta manera, insistió, “sólo sirven para separar”. Lo más adecuado, advierten especialistas, sería usar el concepto en términos étnicos, como son los rasgos fenotípicos, lingüísticos o culturales exclusivos.
Indígena o afromexicano por autodeterminación….
Sin embargo, se puede “originario de los pueblos indígenas” o integrante de un grupo étnico por elección o autodeterminación, a pesar de que no se sea nativo ni se hable el dialecto originario.
En México, según datos de la Encuesta Intercensal 2015, realizada por el Inegi, 7.2 millones de mexicanas y mexicanos hablan una lengua indígena (uno de cada cuatro, el náhuatl) y casi 25.7 millones (21.5% de la población nacional) se identifican como indígenas.
Pero sólo el 27.6% de quienes se identifican como indígenas habla una lengua originaria.
Se tiene además, a la población afrodescendiente, compuesta por un millón 400 mil, que entra en la clasificación étnica, y a la cual también se puede acceder no sólo por rasgos fenotípicos, como color de piel, sino por autodeterminación o elección.
El término afromexicano se estableció hace apenas 14 años en el país, y es utilizado para identificar a aquellos mexicanos de ascendencia africana subsahariana, llamados afrodescendientes, asentados principalmente en regiones de Guerrero, Oaxaca, Michoacán y Veracruz.