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Desalojan el edificio del Congreso estatal

Así luce el Congreso con la toma religiosa. Foto HAIDEE GALICIA
 

 

Luego de anunciar el desalojo del edificio del Congreso, el Movimiento Morelense por la Familia, que congrega a asociaciones religiosas, juveniles, ciudadanos y estudiantes, solicitó al Legislativo presentar de manera pública en una mesa de diálogo las actas de los cabildos donde se valida el matrimonio igualitario.

Los manifestantes hicieron notar la denuncia de los alcaldes sobre las presiones que recibieron para aprobar el tema a cambio del rescate financiero, hecho que quedó comprobado cuando los diputados dieron a conocer que contarían con los recursos para enfrentar sus deudas.

Señalaron que es por eso que los legisladores, en lugar de responder a la exigencia de la sociedad, acusan una irrupción violenta o como responsables de desmanes en ese lugar.

Mencionaron que si el presidente de la Mesa Directiva, Francisco Moreno Merino, está muy seguro sobre la legalidad del proceso que realizaron de manera secreta, que presente las copias certificadas de los 32 municipios que hasta ahora han terminado su plazo para la entrega de la resolución de Cabildo sobre la ley de los matrimonios igualitarios y explique las razones por las que Jonacatepec y Tepalcingo aparecen en tiempo y forma en la recepción de sus actas, determinando la afirmativa ficta.

Roberto García Ortega, de la Coalición por la Vida y la Familia; Karina Fuentes Villegas, de Generando Participación para la Democracia, Mauricio Fernández Pardo, de la Alianza Ministerial Evangélica, entre otros, señalaron que no era gratuita la reunión de diputados con alcaldes donde les prometieron que recibirán recursos para salvar a sus administraciones, luego de votar a favor de la reforma que valida a los matrimonios igualitarios. Descartaron que el movimiento esté subsidiado por el PAN o la iglesia, sino que como organizaciones ciudadanas, buscan explicación coherente por parte de los legisladores, que sesionaron a escondidas.

Finalmente señalaron que dejarán las instalaciones del Congreso, pero el sábado 2 de julio llevarán a cabo una marcha en rechaza a esta unión homosexual, y en apoyo a la familia tradicional y natural.

"Reiteramos que este movimiento es inclusivo, social, apolítico y no religioso, con apego y respeto al credo, raza, color, y el único interés es a favor de del respeto a la familia natural como núcleo social".

 
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