CNDH: que no quede huella
Ocupada más en la demolición de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) que en la defensa de los derechos humanos, Rosario Piedra desaparece la Oficina Especial para el Caso Iguala, que realizó el más acucioso estudio que existe sobre la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, y ordena “valorar el alcance de las investigaciones así como, principalmente, encontrar la forma de avanzar hacia una conclusión de las investigaciones”.
La presidenta de la CNDH dispuso la desaparición de la Oficina Especial para el Caso Iguala e instruyó a la Dirección General de la Primera Visitaduría encabezar los trabajos de acompañamiento y seguimiento para abordar el caso de los 43 normalistas desaparecidos en Ayotzinapa. En el boletín oficial de la defunción aparecen textuales estas mentiras:
“Dicha oficina especial fue creada el 18 de diciembre de 2014 como parte de las investigaciones que se siguieron en torno a los hechos ocurridos la noche del 26 de septiembre de 2014 cuando 80 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa que viajaban en dos autobuses en el norte de Guerrero camino a Ciudad de México, fueron interceptados y uno de los vehículos, con 43 de los normalistas, desapareció tras un enfrentamiento contra policías municipales y miembros de la delincuencia organizada”.
Si en los días inmediatos al crimen la Fiscalía de Guerrero localizó a más de 60 jóvenes que se refugiaron y se daban por desaparecidos pero se busca todavía a los 43, la suma no da “80”.¿De dónde se saca que los que se reclaman viajaban en un solo camión? ¿Por qué tanto la extinta PGR y el GIEI contaron “cinco” y la CNDH anterior a Piedra “seis” autobuses? ¿Y qué con las estériles sospechas del GIEI sobre “el cuarto autobús” con la droga?
Y peor: ¿de dónde saca la degradada CNDH la patraña de que hubo “un enfrentamiento contra policías municipales y miembros de la delincuencia organizada? ¿Los muchachos fueron quienes atacaron a los que los levantaron y a sus asesinos?
Añade el boletín que desde que asumió el cargo “la ombudsperson anunció que la recomendación 15VG/2018, que realizó la administración anterior de este organismo, sería analizada junto con los familiares de los 43 normalistas desaparecidos, con la finalidad de valorar el alcance de la misma y principalmente encontrar la forma de avanzar hacia una conclusión de las investigaciones”.
En el colmo de la ignorancia, como es evidente, Rosario Piedra no sabe que la recomendación a que alude es conclusiva y que lo más que procede sería darle seguimiento para ver en qué medida las autoridades gubernamentales han dado cumplimiento a sus observaciones y sugerencias, o para enriquecerla con nuevas aportaciones.
Ni una palabra, eso sí, sobre los 114 restos óseos del basurero de Cocula que la fumigada Oficina Especial recomendó enviar para su estudio genético a la Universidad de Innsbruck.
El riesgo, ahora, es que Piedra Ibarra recomiende… que los incineren.