Le apuesta a la división y opacidad; y al pisoteo a los documentos básicos de este instituto político
Debe el CDE jugar un papel importante como promotor de la unidad y solucionar cualquier diferencia
Luego de los escándalos provocados por el presidente del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional en Morelos, su secretaria general, Maricela Velázquez Sánchez acusó a Alberto Martínez González de inepto al apostarle a la división y opacidad que representa el pisoteo de los documentos básicos de este instituto político.
En entrevista, expresó que la función de los partidos políticos en la actualidad, es la de jugar un papel importante como promotor de la unidad para convertirse en la vía de comunicación y solución a los grandes problemas de actualidad, lo que no ocurre en la entidad cuando en el pasado consejo político -que fue más un encuentro de amigos, dijo-, al omitir convocar a todos los consejeros acreditados.
“Alberto Martínez le apuesta a la división, denostación y a la opacidad en los puntos a través de los recursos que se reciben cada mes a través del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (IMPEPAC), lamento que no se convocara a los integrantes del Consejo Político Estatal en base a los estatutos que marca la norma y lo peor, que la dirigencia nacional no está enterada de la realización de este Consejo y que al menos en su carácter de consejera política no fue convocada y son muchos que en su condición han manifestado mediante escrito situación similar”.
Desafortunadamente la intolerancia reinó en esta reunión de amigos como se puede destacar en el caso de un ex diputado local fue expulsado a empujones del evento, hechos documentados con un fedatario público y se convertirá en un acto de calificación de los ciudadanos que dan cuenta el nulo compromiso social por parte del actual dirigente del comité estatal, explicó.
Maricela Velázquez Sánchez hizo un exhorto al presidente Alberto Martínez González para que haga un ejercicio de auto reflexión y para que ubique si está rebasado en sus funciones, porque aclaró que lo que hace un buen dirigente, es llamar a la unidad, al diálogo, suma, respeto, tolerancia para que en base a ello, pudiera recurrir a las instancias jurídicas nacionales para dar curso a cualquier situación pero sin cometer excesos.
Calificó a su dirigente como falto de actitud e inepto para conciliar mediante el llamado al diálogo porque la actual crisis ha trascendido por estos escándalos y no a través de la suma y buenos resultados, por lo que confió en que su Comité Ejecutivo Nacional esté al pendiente de lo que ocurre en Morelos para hacer el llamado al apego a la legalidad que permita convertirse en un partido competitivo que ante todo concilia.