En los últimos tres años, la empresa del Estado pagó 312 millones de pesos a la Marina por el resguardo de sus instalaciones estratégicas
Con el fin de evitar daños por vandalismo y para combatir robos, entre 2017 y 2019, Petróleos Mexicanos (Pemex) pagó 312 millones 60.1 mil pesos a la Secretaría de Marina (Semar) para que vigile sus instalaciones estratégicas.
El año pasado, la empresa productiva del Estado destinó más de 139 millones 407 mil pesos para el resguardo de instalaciones, de acuerdo con información de la Subdirección de Salvaguardia Estratégica (SSE).
El gasto en 2019 representa un incremento de 51% respecto a los 92 millones 468.1 mil pesos que la petrolera destinó al rubro en 2018.
El incremento en lo pagado a la Secretaría de Marina tiene que ver, además, con la estrategia de combate al robo de hidrocarburos, conocido como huachicol, en todo el país, durante el último año.
Desde inicios de 2019, la Semar, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional participan en el plan para proteger las instalaciones estratégicas de la empresa del Estado.
En enero del año pasado, se anunció que la Semar tendría bajo su resguardo nueve terminales de abastecimiento y dos refinerías, mientras que la Sedena vigilaría 30 terminales de despacho y cuatro complejos refinadores.
MARINA RESGUARDA ACTIVOS DE PEMEX
Entre 2017 y 2019, Petróleos Mexicanos (Pemex) pagó 312 millones 60.1 mil pesos a la Secretaría de Marina (Semar), por la vigilancia de sus instalaciones consideradas estratégicas y el Plan en contra del robo de hidrocarburos.
De acuerdo con información de la Subdirección de Salvaguardia Estratégica (SSE) de la petrolera, publicada en la Plataforma de Transparencia con el folio 1857200010320, tan sólo en 2019 se erogaron más de 139 millones 407.5 mil pesos.
La mencionada cifra significó un aumento de casi 51% en comparación a los 92 millones 468.1 mil pesos de 2018.
Aunque la empresa no da detalles, reconoció que el mencionado pago hecho a la dependencia es por la vigilancia que otorga a sus instalaciones, a fin de evitar daños por vandalismo y para combatir los robos, como los que últimamente se han registrado en las plataformas petroleras.
A lestos montos se suman los 80 millones 184.5 mil pesos que se erogaron en 2017, por lo que, en tres años, la cifra ya sumó los 312 millones 60.1 mil pesos.
El aumento significativo de los recursos que se han pagado a la Secretaría de Marina, principalmente en el último año, también tienen que ver con la estrategia que se ha implementado en todo el país para combatir al denominado huachicol, y el daño que esto causa no sólo al erario, sino también a los equipos.
COMBATE AL ROBO
Es importante mencionar que, a principios del año pasado, el gobierno federal lanzó el Plan Conjunto para Combatir el Robo de Hidrocarburos, donde han participado 15 dependencias y con el cual también se anunció la atención que las autoridades militares le darían a Pemex.
Como parte de esto, tanto la Semar como la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se han coordinado con la empresa del Estado para proteger instalaciones estratégicas.
Entre ellas destacan las seis refinerías, 39 terminales de almacenamiento y despacho, una marítima, 12 estaciones de rebombeo, el centro de control en los accesos en las instalaciones, verificación de cuartos de control y medidas de control volumétrico.
De manera específica, se anunció que la Semar tendría en resguardo nueve terminales de abastecimiento y despacho, dos refinerías, mientras que la Sedena vigilaría 30 terminales de abastecimiento y despacho, así como cuatro complejos refinadores.
Según el gobierno federal, desde enero de 2019 se desplegaron al menos 50 elementos por cada 20 kilómetros con un total de 8 mil 600 efectivos de las fuerzas navales, militares y la Guardia Nacional.
Dentro de estas acciones, también se llevó a cabo la intervención de la Sedena y Marina en la Torre Ejecutiva de Pemex para el Sistema de Control y Adquisición de Datos (SCADA), donde 44 ingenieros militares de ambas dependencias se encargan de verificar y monitorear cualquier pérdida de presión en los ductos, ocasionados por tomas clandestinas.
Entre los equipos utilizados para estos trabajos se están destinando cinco aviones, 10 helicópteros y 21 aeronaves no tripuladas.