Que se castigue con todo el peso de la ley a los responsables; son protegidos por los jefes de la CESP
A siete meses del hecho, no hay ningún elemento que haya sido despedido y sancionado
La violación de que fue objeto Mariana García Llantada por elementos policiacos del Mando Único, además de ser condenada y recriminada por el Movimiento en Morelos, exigieron que se investigue y se castigue con todo el peso de la Ley a los responsables que impunemente siguen siendo protegidos por los jefes de la Comisión de Seguridad Pública de Morelos.
La organización Mujeres en Movimiento Morelos que pertenecen al Partido Movimiento Ciudadano, condenaron la presunta vejación sexual cometida en contra de Mariana García Llantada, el 12 de diciembre del 2015 en un establecimiento local y que lamentablemente hasta el momento, luego de siete meses no hay ningún elemento de seguridad que haya sido despedido y castigado conforme a la Ley.
“Hacemos un enérgico llamado al titular de la Fiscalía General del Estado de Morelos, Javier Pérez Durón, para que el caso de la presunta violación contra Mariana no quede impune y se lleve a cabo una investigación exhaustiva, a fin de confirmar jurídicamente las conductas antisociales de los elementos del Mando Único”, pidieron las féminas del partido naranja.
Anunciaron que la víctima denunció los lamentables hechos el pasado 20 de enero del presente año y por tal razón, también están pidiendo el que se garantice la seguridad de ella y no sea objeto de represiones y amenazas, así como para impedir al mismo tiempo que otras mujeres pudieran ser víctimas a manos de quienes son los responsables de resguardar y garantizar la seguridad de la población en la entidad.
Insistieron que en Mujeres en Movimiento Morelos reprueban cualquier acto de violencia cometida contra las mujeres y por tal razón, han decidido manifestarse y mostrar su solidaridad con quienes están atravesando por algún tipo de violencia como la antes señalada.
En virtud de lo anterior y tras los hechos lamentables, hicieron un exhorto a las mujeres para que denuncien cualquier acto de agresión o violación a sus Derechos Humanos por parte de cualquier persona, para que las autoridades actúen en consecuencia y se les garantice una vida libre de violencia, al tiempo de hacer un reconocimiento a Mariana por haber decidido no permitir que este acto criminal se haya mantenido en el anonimato como miles de casos que se siguen registrando lamentablemente por el temor hacia quienes tienen la encomienda de garantizar la seguridad de la sociedad en general.