Después del 8 y 9M, ideas de la OMS
Más allá de lo que inspire en términos de conciencia individual y social el movimiento de mujeres que tendrá en la marcha del 8 y el paro del 9 de marzo momentos culminantes, debería también provocar acciones en políticas públicas que ayuden a aminorar los problemas que esos días se denunciarán.
La violencia contra las mujeres abarca desde el abuso verbal, el físico, el sexual, el emocional… En el extremo está el feminicidio.
Muchas organizaciones e instituciones en México y el mundo han venido estudiando el asunto y proponiendo medidas concretas para comenzar a atacar la tragedia. Y tal vez la primera lección es que el asunto involucra a muchas áreas de cualquier gobierno, no solo a la de aplicación de justicia.
La Organización Mundial de la Salud por ejemplo ha hecho un documento con ideas y propuestas. Cito.
Primero, es preciso intensificar la recopilación y el análisis de datos sobre mortalidad, desglosar esos datos por sexo y, en el caso de los asesinatos, garantizar la documentación de la relación entre la víctima y el perpetrador. Estos datos pueden ser complementados con información de otras fuentes (por ejemplo, la policía, las morgues, los tribunales y los médicos forenses). La capacitación y la sensibilización del personal sanitario, del personal de las morgues y de los médicos forenses podrían ayudarles a mejorar la documentación de los casos de feminicidio y de las circunstancias que los rodean.
Además, es necesario mejorar la capacidad de los prestadores de servicios de salud para identificar la violencia infligida por la pareja y el riesgo de feminicidio. En algunos entornos, los estudios han revelado que muchas mujeres utilizaron servicios de salud en el año anterior a ser asesinadas por sus parejas. Se ha señalado que el mejoramiento de la detección en los sistemas de salud de la violencia grave infligida por la pareja, en particular durante el embarazo, es un medio de reducción del riesgo de feminicidio. En Estados Unidos se han creado varias herramientas de evaluación para detectar riesgos de violencia infligida por la pareja y de feminicidio. Estas herramientas deberían ponerse a prueba en otros entornos.
Sí, aunque los diputados no lo crean, no todo es prisión.
@puigcarlos