Entre AMLO, la Corte y un toque de mota
Obligados por las decisiones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, los senadores apuran la aprobación de una ley para regular la producción, comercialización y uso de la mariguana, incluyendo su uso lúdico en México.
Pobres senadores.
En el fondo, la mayoría son unos conservadores que no importa desde qué posición o en qué partido —ya ven que se mudan mucho— están incómodos con eso de la mariguana regulada. Por eso es por lo que ya llevamos años en el tema y nada ha sucedido y por eso lo de estos días viene de la Corte.
Ahora la cosa se puso peor: por un lado, el mandato judicial y por el otro el Presidente, al que su mayoría escucha todas las mañanas con atención, que en los últimos días nos ha dicho que las víctimas de ejecuciones andan drogadas y que a pregunta expresa dijo que no le gustaba lo del uso lúdico de la mariguana.
¿Qué están haciendo? Una linda simulación, nada raro.
Pocas instituciones, yo diría que la más tenaz ha estado detrás de este tema tanto tiempo como México Unido Contra la Delincuencia. Conocedores de los males que ha generado la prohibición, han propuesto maneras de regular a legisladores desde hace tiempo, incluidos los que hoy ocupan lugares en ambas cámaras.
Ayer a la luz del dictamen dijeron, entre otras cosas específicas de lo aprobado, lo siguiente: “Las modificaciones siguen siendo insuficientes, el proyecto de dictamen crea sobre regulación, acentúa la criminalización y crea barreras de entrada para pequeños participantes, permitiendo que sólo la industria se beneficie del mercado y dejando de lado principios (de) los ejes de justicia social, salud pública y derechos. Ante este escenario, alertamos a la población y urgimos al Senado a no aprobar este dictamen en sus términos”.
Fueron claros en que “no despenaliza el cannabis para regularlo. Al contrario, reintroduce y refuerza la penalización que se había atenuado en 2017. Es una simulación que hace a las personas campesinas y usuarias aún más vulnerables a la extorsión y criminalización”.
Es decir, castiga a los pobres, beneficia las empresas grandes que quieran entrarle.
Curioso.
Veremos qué dice el pleno, sospecho que poco.
@puigcarlos