El pobre, muy pobre, gobernador Barbosa
Nos hacen ver que al gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, se le puede criticar de muchas cosas, pero nunca de sus conocimientos científicos sobre la pandemia de Covid-19, y mucho menos, por su clasificación sobre las clases sociales en el país. Ayer, don Miguel se lució con una de esas declaraciones que hacen historia: “La mayoría son gente acomodada. Hay mucha gente de las 40 personas, algunos son padres de familia sí, la mayoría son gente acomodada, eh, ¿sí lo saben, o no? Si ustedes son ricos tienen el riesgo, si ustedes son pobres no, los pobres estamos inmunes”, dijo ayer el señor gobernador en referencia a las 38 personas con casos conformados de Covid-19 en el estado de Puebla. Lo interesante, nos dicen, es que los niveles de pobreza en Puebla son muy particulares, pues el autodenominado pobre gobernador posee múltiples propiedades en la Ciudad de México y Puebla, con valor de varios millones de pesos. Entre ellas, una casa que perteneció al presidente Miguel de la Madrid, en una de las calles más cotizadas de la ciudad, Francisco Sosa, en el nada humilde barrio de Coyoacán y por la cual, según él, pagó un precio de ofertón de 10 millones de pesos. Es decir, cualquiera quisiera ser pobre en Puebla, pues se tiene fortuna, propiedades, y además, inmunidad al Covid-19, y quizá muchas otras enfermedades de ricos. De cualquier modo, usted no se confíe y cuídese don Miguel, que los poblanos lo necesitan sano.
La prueba antidrogas de la secretaria de Gobernación
Lo que todo secretario de Estado, que se precie de serlo, debe de tener en su escritorio es: un teléfono rojo con línea directa al Presidente, la famosísima red presidencial; una serie completa de billetes del sorteo del avión presidencial; un timbre para llamar al personal de servicio; una caja de Kleenex; una botellita de gel antibacterial, por aquello de los coronavirus que andan desatados... y ¡una prueba antidrogas! Al menos eso es lo que hay sobre el escritorio de la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero. Y es que su indiscreto fotógrafo circuló dentro de una comunicación oficial una foto en la que se observa lo que doña Olga tiene en su mesa de trabajo. Todos los objetos tienen una razón obvia de estar ahí, pero lo que llama la atención es para qué utiliza la secretaria una prueba antidoping.
La “sana distancia” en el Informe Moreno Valle
En medio de la contingencia por el Covid-19, a los panistas no se les olvida que el titular de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, prometió que para el primer trimestre de 2020 estaría listo el dictamen final sobre la caída del helicóptero donde perdieron la vida la gobernadora de Puebla, Martha Érika Alonso, y su esposo, el senador Rafael Moreno Valle. Si nos ajustamos a los compromisos que el funcionario cuartotransformista se echó encima en conferencia de prensa, el pasado 23 de diciembre, el plazo límite para presentar dicho documento sería el próximo 31 de marzo; más aún cuando, en sus palabras, desde el pasado 20 de enero una comisión de expertos en aeronáutica civil de México, Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea trabaja en la redacción de un informe que “no dejará espacio de duda, quedando perfectamente esclarecidas las causas del accidente”. Panistas nos dicen que habrá que ver si ahora don Javier no busca utilizar el aislamiento social por la pandemia como pretexto para retrasar el dictamen técnico que, a más de un año del incidente, tiene ya una distancia nada sana.
Covid-19 le pega a nuevos partidos
Conforme avanza la emergencia sanitaria por la propagación del Covid-19, las cosas van cambiando en todos los terrenos. Ahora aquellas organizaciones que están en proceso de convertirse en partidos políticos, tendrán que esperar más. Ya no será en junio próximo cuando se determine quiénes llegan a la recta final y logran el cometido. Nos dicen que este viernes, en sesión de Consejo General del INE, se pondrá sobre la mesa el tema de suspender los plazos para aquellos partidos en formación, con lo cual queda detenido el proceso hasta nuevo aviso.